Al comenzarla veremos cómo cobra valor y sentido aquello del Recuerdo de sí; sin esto bien poco podremos hacer, así, el primer descubrimiento es que nuestra biografía es la historia personal de nuestros estados de conciencia. Veremos que al predominar los más bajos se incentivaron los accidentes, «como si los atrajésemos» por nuestra inconciencia. Paralelamente veremos qué extrecha conexión hay entre el suceder y la conciencia, entre lo que hacermos y lo que nos pasa, entre lo que podíamos haber hecho, lo que hicimos y lo que nos sucedió. Veremos cómo en efecto dando un corte biográfico podemos pasar desde «lo que nos pasa», a ser el propio artífice de la propia vida, podemos hacer nuestra cara y nuestro cuerpo, nuestro presente y nuestro pasado, pero antes nos conviene hechar un vistazo al pasado, que hoy nos determina y que para mañana nos predispone.

La biografía escribe lo que el hombre hizo y lo que no hizo, lo que dejó de hacer y lo que le sucedió. Verá que no es dueño de sus actos ni de sus días. Verá que «duerme profundamente y que su mayor ilusión es creer que está despierto» (1). La biografía demuestra cómo las situaciones obsesivas, los accidentes y los desvíos fueron repertorios corrientes, demostrará cómo el suceder y los hechos eligieron por él. También demostrará cómo el medio socio-cultural lo acondicionó de una forma y no de otra. Veremos cómo el apego al mundo fenoménico devino en inconprensión y en conflictos. Veremos cómo los elementos progresivos logrados en los mejores momentos se ven oscurecidos por los peores momentos y sus catastróficas consecuencias.

Notaremos también cómo comprendiendo nuestra propia vida podemos mejor comprender a los demás y aclarar nuestro futuro. Veremos cómo las grabaciones a lo largo de ella repercuten en el presente y cómo cuesta disolver las nefastas consecuencias de las vivencias sin reflexión. Veremos cómo es un bravo trabajo el descristalizar las torpezas cometidas y rescatar las mejores experiencias. Veremos cómo los

Desvíos nos alejaron de metas propuestas y cómo las frustraciones devinieron en impotencias y decepcioens pero la ilusión no menguó hasta darse un fracaso profundo y posibilista de nuevas vidas.

También d:escubriremos los cambios biológicos y sus implicancias y el traslado de puntos de referencia. Finalmente descubriremos cómo los ensueños nos rigieron, cómo se reemplazaron unos a otros y cómo dominaron.

Veremos también cómo las distintas épocas se conectan relacionadamente en distintas convergencias.

Al hacer nuestra biografía, veremos cómo podemos comprender la historia del Homo sapiens al haber atravesado momentos crepusculares, otros de alguna vigilia y otros de franca lucidez; y cómo lo hecho, la obra ejercitada, tiene cada vez mayor o menor significado, mayor o menor perdurabilidad; y cómo los extremos lúcidos nos han permitido siempre vislumbrar caminos a seguir.

Ahondando, descubriremos que hemos podido o no realizarlos internamente, que según nos apeguemos a las circunstancias nos postergamos en ellas y que según tomamos perspectivas nos pudimos guiar a nosotros mismos y descubrimos cómo realizarnos. Así tendremos una biografía de la vida mecánica y periférica entrecortada de vez en cuando por el ritmo de la autorrealización y de los mejores momentos de conciencia.

Para ilustrar ambos aspectos, reproduciremos dos esquemas: el primero para comprender más o menos las circunstancias cotidianas y otro para comprender algún proceso interno realizador. A saber:

1- En un círculo disponemos de 12 casilleros, allí admitiremos nominaciones para cada uno, lo que facilitará ordenar los datos metódicamente y sin que se escapen algunos importantes (pero para esto previamente hemos visto el capítulo de autobiografía” en el mentado libro “Siloísmo”).

Sucesivamente tenemos:

Casillero 1: Personalidad: aspecto-vitalidad-máscaras.

Casillero 2: Posesión: dinero-riqueza-pobreza.

Casillero 3: Ambiente: hermanos-vecinos-relaciones.

Casillero 4: Prestigio: hogar-raza-fin.

Casillero 5: Placer: fiestas-artefactos-protección.

Casillero 6: Salud: malestar-utilización-beneficios.

Casillero 7: Complemento: matrimonio-riñas-firmas.

Casillero 8: Muerte: regalos-temor-fortuna.

Casillero 9: Viajes: Complicación-ciencia-transporte.

Casillero 10: Profesión: acciones-renombre-caídas.

Casillero 11: Afinidad: amigos-trabajos-ventajas.

Casillero 12: Violencia: duplucidad-encierro-máquinas.

Hecho el círculo y colocado cada casillero con su denominación, podemos ver año por año, etapa por etapa; cómo nuestra vida se fue desarrollando, fijando o regresando, como se apegó a las cosas o hechos y cómo se confundió. También cómo se despegó y se tornó autónoma. Lo interesante es establecer relaciones entre los casilleros y por su intermedio entre los distintos años, pasados y por venir.


(1) Ver «El Mensaje». En el Librito y en Fragmentos del P.J.-1 en «Aproximación al Trabajo».