a) Vitalidad, energía propia que humanamente se tiene

b) energía fomentada por prácticas idóneas y por conexiones “más que humanas”.

Caso favorable

La maquinaria, por un motivo u otro, advierte una subida energética y en este caso favorable lo óptimo es: Se energetizan todos los centros, en especial las partes más conscientes; aumenta la conciencia de sí, los sueños menguan, la personalidad se hace flexible, se trabaja en deliberación y desadherido del contorno “con perspectiva”.

Caso desfavorable

La energía en alza, sufre circuitos contradictorios. En los centros se atasca el pasaje o se detiene y desborda. En general se queda en las partes mecánicas (motricidades). La personalidad se endurece en cáscaras que asfixian al Yo. Los sueños aumentan sugestionabilidad y dimensión. La autoconciencia nula.

Proceso

La energía puede progresar, fijarse o regresar.

Polaridad

Puede expresarse positivamente (construcción), negativamente (destrucción) o neutra (alternancia entre una y otra).

Tránsito

La energía se “lanza” desde los elevadores (m), se “mantiene” en los adhesores (e) y se “selecciona” en los selectores (i).

Utilización

La energía puede aprovecharse, conservarse (poco tiempo) o desperdiciarse.

Premisa de comprensión

Estos procesos y facetas de las posibilidades de la energía pueden comprenderse únicamente con una base media de autoobservación y el desarrollo de una especie de “sensibilidad de intracuerpo” es decir: de detectar fácilmente qué está pasando y poder filiar correctamente, de otro modo, todo esto suena un poco “extraño”, precisamente uno es extraño a sí mismo cuando no se conoce.

Efectos energéticos

De acuerdo al estado interno de la maquinaria serán los efectos. Si hay “tragedia interior”, es decir, centros mal dispuestos, conexiones incorrectas, partes mecánicas predominando, trabas de identificación o consideración, efectos del deseo como son los estados negativos de angustia, soledad, frustre, etc., la energetización aumentará esta especie de tragedia y resaltará más, así que hay un punto en que se cambia la polaridad y desaparece lo negativo (experiencia interesante).

Si el estado interno es armónico, se enfatizará tal armonía, y la vía de shoquear el Centro superior está en libre acceso.

Siempre que haya un centro en mal estado, éste absorbe la energía de él y de todos impidiendo cualquier irrigación posible, y cualquier ascenso al C. Sup., así la energetización servirá para evidenciar y corregir simultáneamente, pero sin energía bien poco se puede hacer.

Habiendo armonía interna, la energía no tiene posibilidades de sufrir ninguna zancadilla de ningún centro o parte, y puede shoquear arriba, (cosa que no es del otro mundo). Con las “Esferas Mentales” se trabaja en este sentido, con bastante sencillez por cierto.

En suma, que si haya desorden interior, la energía lo exaltará y corregirá con la insistencia, y si hay armonía pasa al centro superior directamente.

Esquema: Veremos el asunto de la energía normal en los siguientes aspectos:

  • a) En las etapas vitales.
  • b) En el “tempo mental”.
  • c) En los gestos.
  • d) En los centros.
  • e) En la personalidad.
  • f) En los sueños.

Veremos el caso desfavorable como pérdida de energía y el caso favorable y positivo como mantenimiento y ascenso de la misma. Hecho un balance entre ambos casos, nos dará la posibilidad de contar con energía y así manejar y disponer de ella.

1.- Caso desfavorable: