Al comenzar el primer ciclo (y en todas las reuniones del mismo) se explica a los coetáneos que es necesario a cada cual, conseguir como mínimo otro coetáneo. De tal modo que al finalizar el ciclo (un mes y medio después), cada miembro de la Cripta cuenta con un coetáneo estable.
De esta suerte, puede construirse el primar grupo alrededor de la Cripta, que irá abasteciendo de reemplazos a medida que se produzcan vacantes.
Así es que a fines del primer ciclo, toda Cripta debe articular su grupo, con los elementos que individualmente han captado los seis coetáneos.
La Cripta no puede iniciar el Segundo Ciclo hasta tanto no haga funcionar un grupo a su alrededor.
Logrado el objetivo, la Cripta comienza al Segundo Ciclo, procurando que el grupo comience el primero. Aprovechando luego otras oportunidades se ha de lograr que el grupo alcance a la Cripta en el nivel de entrenamiento. Ese será el momento de equilibrio de la Cripta y su reemplazo (el grupo). Nuevas expansiones procesará la Cripta al pasar de ciclo a fin de formar nuevos grupos.
Cada reunión debe ser dada al grupo por un coetáneo distinto, de tal manera que todos los miembros de la Cripta den a otros lo que a ellos se da. En ese sentido, nadie podrá exigir más entrenamiento hasta tanto no enseñe a otros lo que sabe.
Al grupo podrán irse incorporando nuevos miembros.
Esto produce un ligero desnivel que debe ser solucionado por los coetáneos más capacitados del grupo. Es decir, los mismos coetáneos han de acelerar a los nuevos dándoles aquellas prácticas que ellos han recibido.
Con otras palabras: Una vez en funcionamiento el grupo, siguen incorporándose nuevos miembros (captados por la Cripta y el grupo) que deben ser acelerados por coetáneos del grupo y no de la Cripta).
Cuando los nuevos ingresos se realizan, mediando más de un ciclo de entrenamiento se organizan grupos separados porque ya el desnivel acarrearía perturbaciones al desarrollo normal del trabajo.
Por otra parte, los grupos tienen limites mínimos (seis coetáneos igual que las Criptas), pero no máximo.
El proceso de captación y por lo tanto de crecimiento de los grupos debe ser continuo, de manera que llegado el momento estos pueden subdividirse en otros o convertirse en Criptas.
Cuando se crea más de un grupo alrededor de la Cripta, se destina específicamente a cada uno, un coetáneo de la Cripta que da el entrenamiento en calidad de Epónimo, sin por eso abandonar su Cripta.