PREGUNTA: «¿Se puede tomar como medida de la verdad histórica de la doctrina, la persecución que pesa sobre ella? De ser así y considerando que la base de nuestra doctrina es la no-violencia, ¿no es contradictorio que las doctrinas que predican la no-violencia sean las más perseguidas? ¿Y con ese mismo criterio, tendría validez cualquiera otra doctrina por el hecho de sufrir la persecución y la reacción del sistema?».

Esto exige un largo análisis, pero, en general, podemos decir esto: no necesariamente toda doctrina que es perseguida (por ese solo hecho), demuestra su validez histórica. No necesariamente. Basta que no coincida con una cantidad de planteos propios del momento histórico en que se vive; o que no coincida con los ensueños; o con el estado del ensueño de una sociedad en un momento dado para que sea perseguida. De hecho una doctrina es perseguida en ocasiones, luego penetra en el cuerpo social y esa misma sociedad con el tiempo la va aceptando. De manera que no pienso que sea criterio de validez el hecho de que una doctrina sufra persecución. Pero si es digno de tenerse en cuenta el hecho de que una doctrina que predique la no-violencia sea perseguida violentamente. De manera que habría que reflexionar más sobre esto.