Dentro de esta metódica expositiva entendemos por nivel de conciencia el estado general de la estructura humana en un momento dado en que un centro (y una parte específica) absorbe la mayor cantidad de energía en desmedro del consumo de los otros.
De este modo:
- El nivel de sueño. Corresponde al trabajo del centro vegetativo que solo libera pequeñas cantidades de energía a otros centros. En efecto, la motricidad se reduce casi al mínimo, las emociones se manifiestan solamente en la motricidad del centro emotivo, las ideas racionales casi no aparecen a diferencia de la motricidad del intelecto que absorbe la mayor cantidad de energía del centro intelectual.
- El nivel de semisueño. Aparece antes de entrar en el sueño o al salir de él. La energía del centro somático se desplaza sobre todo al sexo y la energía emergente llega a las partes emotivas de los otros centros.
- El nivel de vigilia. Se manifiesta el desplazamiento de la energía por todos los centros, partes y sub-partes pudiéndose activar las partes intelectuales de toda la maquinaria. En el nivel de vigilia, el ser humano ha emergido de los estados crepusculares de las especies inferiores a él, pero debe tenerse en cuenta, desde otro punto de vista, que la vigilia es solamente «el techo» del semi-sueño. En efecto, cotidianamente se vive fantaseando, ensoñando, con total olvido de sí mismo.En ese estado se manifiesta la actividad productiva y consciente de la especie aunque individualmente cada ser humano es determinado por sus condicionamientos corporales, sociales y síquicos. El mayor condicionamiento es el de los ensueños y particularmente el núcleo de ensueño que orienta y dirige la vida del hombre hacia horizontes lejanos, jamás alcanzables. De todas maneras, gracias a la relativa fijeza de ése núcleo (alrededor de su «centro» o sol) el hombre puede lograr cierta continuidad en sus proyectos y afianzar su vocación o sus ideales. Ya veremos esto más adelante.
- El nivel de conciencia de sí(12). Se manifiesta cuando la energía se desplaza sobre todo a la parte intelectual del centro intelectual como reflexión sobre sí mismo. La conciencia de sí admite niveles de profundización que van desde una elemental introspección a la verdadera autoobservación (13).Este nivel de conciencia es muy difícil de mantener cotidianamente. No obstante, por reiteración de esfuerzos se comienza a «fijar» al tiempo que la conciencia se amplifica y se desarrolla el centro intelectual en general.
- El nivel de conciencia objetiva(14). Se manifiesta cuando la energía se ha acumulado en grandes cantidades a partir del estado de conciencia de sí mantenido y fijado durante mucho tiempo.Este nivel se evidencia también en estados un tanto accidentales producidos en la proximidad de la muerte, por una enorme sobrecarga emotiva o por acción de la sobrecarga somática propia de los estados crepusculares profundos.