FRANJA

La movilidad del individuo en el espacio, que consiste en movimientos voluntarios e involuntarios actuando el sistema óseo y el muscular coordinados por y con el sistema nervioso.

ORGANO

El centro motriz que coordina estas actividades se encuentra a nivel de:

  1. Corteza, en los lóbulos pre-frontales de la corteza, centro de los movimientos voluntarios.
  2. Médula espinal, actuando como centro de los movimientos involuntarios, arcos reflejos cortos y como la conectiva entre los receptores y la corteza.
  3. Cerebelo, que coordina los movimientos (equilibrio).

VÍAS AFERENTES – TRANSFORMACIÓN Y VÍAS EFERENTES

En un primer nivel estudiamos el sistema del reflejo corto.

Vías aferentes:

Del receptor por la fibra sensitiva al ganglio pre-espinal que actúa como retensor, a la médula donde opera la primera transformación.

Vía eferente:

De la médula al ganglio postespinal y por la fibra neuromotora al efector. En el segundo nivel, encontramos: del receptor por vía aferente a la médula, de ahí por las fibras neuromotoras (haces piramidales y extrapiramidales) a la corteza pasando por el cerebelo. En las localizaciones corticales sucede la segunda transformación y sale por las vías eferentes al hipotálamo conectado con la hipófisis, a la médula y de ahí al efector, en este caso los músculos.

SÍNTESIS

El centro motriz es un transformador de estímulos sensoriales eléctrico-nerviosos que da respuestas de movilidad al individuo para la adaptación a su medio y su sobrevivencia.