Bien, también en el barrio hemos visto, ojalá podamos hacer reuniones sociales, sucede con los colaboradores, estos «variopintos», sucede también que podemos organizar un encuentro con todos, igual que en el barrio y no precisamente en el barrio, porque muchos de ellos no son de ese lugar. Y a veces es un despropósito que los colaboradores que no son de ese barrio, llevarlos a un encuentro en ese barrio porque tenemos allí un local. Eso puede ser un problema. Estamos hablando de esos encuentros que hace la estructura que invitan a sus colaboradores, a éstos a los que llevan este material, a ese encuentro social, donde no se hace nada pero donde la gente se conecta, donde hay reclamos; siempre hay reclamos.

Estamos viendo cuales son las direcciones de nuestras actividades, el modo de trabajo en el barrio con las hojas y demás y también estamos hablando de otra gente, estamos hablando de los colaboradores y necesitamos una especie de hoja de barrio para estos colaboradores. ¿Qué más necesitamos? Necesitamos atenderlos y necesitamos convocarlos, movilizarlos, actividades suaves, estos encuentros. Y si mezclamos a estos colaboradores institucionales con los colaboradores del barrio se nos puede enlentecer la cosa. ¿Cuándo se hacen esos encuentros sociales? Cuando la estructura diga, hay experiencia en eso, cuando resulte oportuno. Y va la estructura, van los colaboradores y todos contentos. Y se aprovecha para explicarles las nuevas cosas que hay, lo que se está haciendo, presentarlos los unos a los otros, conectarlos entre sí. Porque cada colaborador está aislado. Tenemos muchos colaboradores, nosotros sabemos el número, pero puestos en la cabeza del colaborador, él se siente aislado y nosotros tenemos que conectar todo eso. Colaboradores con colaboradores y gente de estructura con colaboradores. Un contacterío, que puede mejorar en las reuniones sociales. Necesitamos un modo de trabajo con los colaboradores, y es este modo suave del que estamos hablando, no la compliquemos, es este modo de trabajo suave donde les hacemos llegar algo, una cosa, un objeto. Debemos hacerles llegar cosas, no basta con que hablemos de cuestiones interesantes. Y esa cosa ojalá tenga daterío, cosas informativas.

Crecerá el anillo de colaboradores, puede mejorar enormemente. No tenemos por qué forzarlos a actividades sostenidas, no tienen por qué perderse estos colaboradores si no los ponemos en situaciones embarazosas, si les informamos de lo que hacemos, porque lo que decimos les interesa mucho. Démosles los nutrientes. No estamos en condiciones aún de hacer más cosas. Primero, como estábamos hablando de los barrios, la base de contacto humano y sobre eso, todo. Nada de movilizaciones de masa, primero el contacto personal y el suministro de una cierta información nuestra y después vemos. Yo creo que se va entendiendo el esquema de dirección: ellos no son estructurales, ellos son colaboradores. Ellos nos apoyan en ciertas cosas a veces muy importantes. Y no notamos diferencias en algunos casos entre un colaborador y un miembro de estructura. Y hay algunos que nos dicen: «ese colaborador está cumpliendo con los requisitos de un miembro de estructura». Yo conozco a varios que realizan actividades permanentes, que además pegamos un viraje táctico y allí están ellos, que siempre están apoyando. Lo que pasa es que no quieren incluirse en la estructura. Ojalá hayamos hecho el diagnóstico bien. Primero, que su actividad sea permanente. Segundo, que esté en todas las actividades que hacemos. Si ésto está bien, hay que revisarlo: ¿por qué no está con nosotros?, ¿qué está haciendo, si está como el culo? Si se va a desintegrar en cualquier momento y se va a caer, si se va a desintegrar en pedazos. Tendrá que hacer una cosa. No basta con que apoye al Movimiento, que está muy bien. Si es un colaborador que está haciendo cosas, si es un tipo fenómeno, él tiene que salvar el pellejo. ¿Y el qué? Ese es el problema. El está colaborando en todo, está en todas las paradas, está haciendo cosas y nosotros lo dejamos al garete. No, no. Nosotros tenemos una responsabilidad con él. El está trabajando, está apoyando y nosotros tenemos que llevarle la «buena nueva». Tenemos que decirle: si usted es bueno para el conjunto, porque hemos visto durante todo este tiempo que está bien su cosa, ¿y usted qué? Hablemos, tienes que venir a trabajar con nosotros y además ver que pasa contigo. ¿Y tu qué? ¿Le vas a creer al sistema que tu no existes, que eres un número, que eres un paciente, que eres un contribuyente? Date cuenta de que tu existes. Colaboradores permanentes y para todas las actividades, rapidito a trabajar en estructura.

Y ahora vamos a hablar de los estructurales.

Vamos transitando por los modos de trabajo, de los colaboradores hacia los estructurales. Ok. Otro cafecito.