Hay colaboradores de distintos tipos. Pero lo que caracteriza a un miembro de estructura con respecto a un miembro del movimiento o un simpatizante o un colaborador muy intenso, la diferencia fundamental está en la permanencia en las actividades, y por otro lado la disposición al cambio de los momentos tácticos. Porque hoy nos conviene hacer una cuestión social, mañana nos conviene hacer una lucha contra la discriminación, pasado nos conviene hacer un acto cultural o un foro comunal y luego nos interesa dinamizar un conflicto obrero por que hay un cierre de fabricas o lo que sea, esto caracteriza la actividad de un miembro de estructura y eso no es así para un simpatizante, adherente, colaborador alguien que es del Movimiento y que hace su cosa bien. Los colaboradores en ciertas cosas no nos van a acompañar. Hablan nuestro lenguaje, se interesan por nuestras cosas, pero a veces nos metemos en líos, tienen compromisos laborales, de parentesco, miedos. Pero estos colaboradores son formidables por el apoyo que nos dan en actividades específicas y cuanto mas crece ese anillo, mas lejos llegamos. En otras ocasiones surgía alguien que aparecía mas o menos como colaborador y ya lo estábamos metiendo a la estructura. Esa experiencia ya está superada. Para que ese anillo de colaboradores crezca debemos mantenerlos mínimamente al tanto de lo que va pasando.
No tiene otro interés la coordinadora que coordinar esfuerzos y que no se nos quede descolgada ninguna línea que esté operando en ese lugar. Que la cosa sea coherente y todos vayamos con un mismo ritmo. Pero además hablamos de una comisión ideológica. La palabra ideológica suena muy rimbombante, entonces parece que tuviéramos que poner ideólogos, porque la palabra es engañosa. Lo que necesitamos poner en esa comisión ideológica son gentes que tienen que ver con la prensa, que tienen que ver con la difusión. Tampoco nos basta formar una comisión ideológica con sólo periodistas, porque los periodistas son periodistas y por lo tanto tienen la ideología del sistema. Necesitamos gente que esté interesada por la situación que se está viviendo en este momento, prácticamente y no por los grandes procesos históricos. Necesitamos gente que esté al tanto de lo que pasa, que sepa hacer una gacetilla, que establezca contacto con la prensa, tenga amigos en la prensa, haga llegar la noticia, sepa como redactar las cosas, con el punto de vista nuestro. Si nosotros hacemos circular hacia la prensa y a la gran difusión ciertos puntos de vista sobre las coyunturas que se dan, mas vale que sean nuestros puntos de vista. Por eso es que tiene una componente ideológica importante esa comisión, y no es de sólo periodistas. Y tampoco es de ideólogos. Las comisiones ideológicas tienen que ver con el contacto con el mundo, y ojalá esté ahí el vocero, gente de prensa de los distintos organismos que haya en el lugar. Pero relacionados con lo que va hacia afuera. Con lo que va como comunicado, como declaración, como informe, esa es la función que necesitamos para la comisión ideológica. Y siempre está claro el código que estamos mandando. Quiénes lo dicen, y cómo lo dicen. Hacia adonde apunta, elaborando además un material que será destinado a los colaboradores.
Entonces les haremos llegar a nuestros colaboradores, lo acepten o no, nuestra orientación. Si las líneas convergen en la coordinadora y esa coordinadora tiene su comisión ideológica el material llegará a las líneas, de tal modo que si en algunos puntos quieren agregar información local a ese material, lo puedan hacer. Pero debe estar en mi cabeza, para que esto funcione el impulso de nutrir a esos colaboradores. Si no, yo tampoco voy a presionar a la comisión ideológica, no voy a preocuparme mucho de que mejoren los materiales y la comisión ideológica no va a hacer algo que no vea que tenga importancia.
Parece que el colaborador es el que siempre debiera estar llamándonos por teléfono o enterándose por si mismo de las cosas que estamos haciendo y de lo que pensamos. Y acá hay que invertir el mecanismo. Hagámoslas rendir mas a las comisiones ideológicas. Ahí esta el instrumento, si es que esta bien armado. A ver si producimos materiales aunque sea una vez por mes con las actividades que hemos realizado, con extractos de comunicados de prensa y cosas que hemos hecho que van en la dinámica. Nadie mas indicado que las propias líneas para saber a quien se les distribuye. Y si las líneas no están interesadas en nutrir a sus colaboradores, si suponen que deben venir los colaboradores así como en los locales de los barrios, suponen que deben venir los vecinos, si esa es la posición mental, no funcionara. El mejor contacto con las personas es con cosas, por lo menos hoy. Si se fijan, es parecido a lo de la hoja de barrio, pero en este caso es actuando sobre los colaboradores.
Sería muy bueno que las comisiones ideológicas fueran reconsideradas y estudiar nuevamente como las armamos, no solamente con el tema prensa para dar respuesta al momento sino también para preparar este material mensual que nos va a servir para llegar a los colaboradores que hoy son importantes y que lo van a ser cada vez mas.