Han pasado once años desde que este libro fué puesto a consideración del público. El texto no ha sido modificado sustancialmente, si bien hemos preferido dejar de lado, en la actual presentación, algunas referen­cias a cuestiones complejas sobre la naturaleza de la forma; igualmente, algunas consideraciones que se hicieron sobre la ubicación de la Morfología en una amplia concepción de la teoría de la conciencia han pasado a ser epílogo. También se ha remozado considerablemente el material gráfico que acompañara a la anterior edición. Todas las modifi­caciones anotadas no hacen, desde luego, al discurso general ni a la com­prensión sustancial de la obra.

Quisiera agregar que el veloz desarrollo de los medios de difusión y el inevitable progreso de las formas de publicidad y propaganda nos ha plan­teado la necesidad de comprender estos fenómenos desde el punto de vista de la transformación de los signos de comunicación en el contexto histó­rico.

Desafortunadamente, entrar en este tema rompería la secuencia del presente trabajo, de modo que ésto me compromete a desarrollar mis con­clusiones en una publicación aparte.

 

José Caballero Madrid, 5 de Abril de 1992