La violencia se manifiesta como la acción y efecto de despojar al otro de su intencionalidad (y, por cierto, de su libertad); como acción de sumergir al ser humano, o a los conjuntos humanos, en el mundo de la naturaleza. O sea, por la violencia se anonada la intención de otros, considerándolos objetos, prótesis de mi propio cuerpo, en cuyo caso debo “vaciar” su subjetividad totalmente (objetivizándolos) o, por lo menos, en aquellas regiones del pensar, el sentir, o el actuar que deseo gobernar de modo inmediato. Las distintas formas de violencia (física, económica, racial, religiosa, psicológica, etc.) son expresiones de la negación de lo humano en el otro. Veamos cada una de ellas.
Quien hace algo que ocasiona dolor y daño físico, corporal, ejerce violencia física. O sea, cuando se inflige dolor, cuando se deterioran funciones vitales, o, por último, se ocasiona la muerte.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia física: guerra – terrorismos – homicidio – agresión (física) – tortura – estupro – “punición” física de mujer/marido e hijos – muerte por inanición – enfermedades endémicas y las llamadas “sociales” – suicidio – contaminación de recursos naturales – adulteración de medicinas y alimentos – etc.
Quien hace algo que perjudica a otros en sus legítimos derechos económicos o situación económica ejerce violencia económica. En otras palabras, cuando se atenta contra la subsistencia y nivel mínimo de vida, cuando se priva de legítimas ganancias o propiedad, etc.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia económica: monopolización – explotación – esclavitud – defraudación – comercialización deshonesta – sobrevaluación – tasar por defecto o por exceso (según el caso) – especulación – desfalco – robo – hurto – estafa – usura – soborno – extorsión – acaparamiento – etc.
Tanto en la violencia física como económica, algunos casos se deben a incompetencia o a negligencia culposas, o a la falta de suposición para evitarlos, o al derivar de recursos que pudieran evitarlos a otras áreas de interés, etc.
Cuando alguien hace algo que perjudica a otros en razón del credo que profesa, o porque no lo hace, ejerce violencia religiosa. O sea, cuando la agresión se basa en la diferencia de creencias o prácticas religiosas, o cuando un bando daña a otros porque estos no ceden a sus dictámenes, o cuando simplemente algunos se convierten en blanco de otros por no adherir a ninguna creencia o práctica religiosa establecida, etc.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia religiosa: intolerancia religiosa – oscurantismo – fanatismo – fundamentalismo – difamación – “intocabilidad” entre castas – inquisición – excomunión – discriminación – guerras “santas” – religión oficial – etc.
Existen muchas otras formas de violencia religiosa que coartan la libertad, la felicidad y el desarrollo del ser humano, generando con ello divisiones entre la gente, bloqueando vías positivas de investigación científica y progreso social, justificando (o no oponiéndose) a leyes y prácticas deshumanizante, coartando la libertad por sanción “divina” a través de variadas amenazas, coacciones y violencias.
Cuando alguien hace algo que perjudica a otros en razón de sus orígenes, rasgos, costumbres, etc. étnicos, ejerce violencia racial. O sea, cuando algunos perjudican a otros porque estos tienen, por ejemplo, una apariencia física diversa de la propia.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia racial: racismo – esclavitud – discriminación – segregación – apartheid – pogroms – teorías de supremacía o inferioridad racial – etc.
Algunas otras formas de racismo no son tan evidentes, como el arriesgar a ciertos tipos (sub)raciales en el campo de batalla antes que a otros, o caricaturizarlos a través de los medios de difusión masiva, a aplicando duplicidad de criterios al tratar con razas diversas, etc.
Cuando alguien hace algo que perjudica a otros psicológicamente, mentalmente, moralmente o emocionalmente, ejerce violencia psicológica. O sea, cuando se perjudica a la unidad, coherencia, o equilibrio interno del otro.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia psicológica: amenazas varias – promoción del terror, odio, etc. – imposición forzada de ideologías, etc. – propaganda falsa o negativa – promoción de falsos valores de vida – educación prejuiciosa – censura de áreas del conocimiento, la cultura, etc. – desinformación – nihilización – etc.
Hay mucho de violencia psicológica en el imponer formas de vida, de subsistencia, credos, costumbres, etc. O sea, imponer los propios modelos sobre otros por medio de la coacción, la extorsión, o la ignorancia (promovida o aprovechada). Mucho de esto se esconde bajo palabras tales como “educación”, “moral y buenas costumbres”, “tradición”, etc.
Por último, también podríamos mencionar la violencia moral, en la que incurre quien es cómplice de cualquier forma de violencia. Esta admite varios grados, pero cualquiera que, aunque no esté directamente comprometido, consiente o no hace nada por impedir la violencia, es también responsable por ella y sus consecuencias. Dejar de ser un testigo pasivo de la violencia y comenzar a transformar las condiciones de violencia es un tema de responsabilidad moral.
VIOLENCIA ECONÓMICA
Violencia económica es una de las muchas formas de violencia que se manifiestan en conjuntos humanos (violencia social) y entre individuos (violencia interpersonal).
Quien hace algo que perjudica a otros en sus legítimos derechos económicos o situación económica ejerce violencia económica. En otras palabras, cuando se atenta contra la subsistencia y nivel mínimo de vida, cuando se priva de legítimas ganancias o propiedad, etc.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia económica: monopolización – explotación – esclavitud – defraudación – comercialización deshonesta – sobrevaluación – tasar por defecto o por exceso (según el caso) – especulación – desfalco – robo – hurto – estafa – usura – soborno – extorsión – acaparamiento – etc.
Algunos casos de violencia se deben a incompetencia o negligencia culposas, o a la falta de disposición para evitarlos, o al derivar recursos que pudieran evitarlos a otras áreas de interés, etc.
VIOLENCIA FÍSICA
Violencia física es una de las muchas formas de violencia que se manifiestan en conjuntos humanos (violencia social) y entre individuos (violencia interpersonal).
Quien hace algo que ocasiona dolor y daño físico, corporal, ejerce violencia física. O sea, cuando se inflige dolor, cuando se deterioran funciones vitales, o por último, se ocasiona la muerte.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia física: guerra – terrorismos – homicidio – agresión (física) – tortura – estupro – “punición” física de mujer/marido e hijos – muerte por inanición – enfermedades endémicas y las llamadas “sociales” – suicidio – contaminación de recursos naturales – adulteración de medicinas y alimentos – etc.
Algunos casos de violencia se deben a incompetencia o negligencia culposas, o a la falta de disposición para evitarlos, o al derivar recursos que pudieran evitarlos a otras áreas de interés, etc.
VIOLENCIA MORAL
Violencia moral es una de las muchas formas de violencia que se manifiestan en conjuntos humanos (violencia social) y entre individuos (violencia interpersonal).
Violencia moral es aquella en la que incurre quien es cómplice de cualquier forma de violencia. Esta admite varios grados, pero cualquiera que, aunque no esté directamente comprometido, consiente o no hace nada por impedir la violencia, es también responsable por ella y sus consecuencias.
El “ocuparse de los propios asuntos”, la indiferencia, el encierro mental, el egocentrismo, la insensibilidad, la incomunicación, el egoísmo, la beatería, etc. son terreno fértil para la violencia moral.
Algunos casos de violencia moral se originan en la incompetencia o negligencia culposas, o en la falta de disposición a evitar la violencia, o en la desviación de recursos que pudieran evitar la violencia hacia otras áreas de interés, etc.
Por otra parte, la solidaridad, la comunicación, el interés por los que nos rodean, la acción voluntaria de interés social, la participación en los asuntos sociales, etc. predisponen en otro sentido.
VIOLENCIA RACIAL
Violencia racial es una de las muchas formas de violencia que se manifiestan en conjuntos humanos (violencia social) y entre individuos (violencia interpersonal).
Cuando alguien hace algo que perjudica a otros en razón de sus orígenes, rasgos, costumbres, etc. étnicos, ejerce violencia racial. O sea, cuando algunos perjudican a otros porque estos tienen, por ejemplo, una apariencia física diversa de la propia.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia racial: racismo – esclavitud – discriminación – segregación – apartheid – pogroms – teorías de supremacía o inferioridad racial – etc.
Algunas otras formas de racismo no son tan evidentes, como el arriesgar a ciertos tipos (sub)raciales en el campo de batalla antes que a otros, o caricaturizarlos a través de los medios de difusión masiva, a aplicando duplicidad de criterios al tratar con razas diversas, etc.
VIOLENCIA RELIGIOSA
Violencia religiosa es una de las muchas formas de violencia que se manifiestan en conjuntos humanos (violencia social) y entre individuos (violencia interpersonal).
Cuando alguien hace algo que perjudica a otros en razón del credo que profesa, o porque no lo hace, ejerce violencia religiosa. O sea, cuando la agresión se basa en la diferencia de creencias o prácticas religiosas, o cuando un bando daña a otros porque estos no ceden a sus dictámenes, o cuando simplemente algunos se convierten en blanco de otros por no adherir a ninguna creencia o práctica religiosa establecida, etc.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia religiosa: intolerancia religiosa – oscurantismo – fanatismo – fundamentalismo – difamación – “intocabilidad” entre castas – inquisición – excomunión – discriminación – guerras “santas” – religión oficial – etc.
Existen muchas otras formas de violencia religiosa que coartan la libertad, la felicidad y el desarrollo del ser humano, generando con ello divisiones entre la gente, bloqueando vías positivas de investigación científica y progreso social, justificando (o no oponiéndose) a leyes y prácticas deshumanizante, coartando la libertad por sanción “divina” a través de variadas amenazas, coacciones y violencias.
VIOLENCIA PSICOLÓGICA
Violencia psicológica es una de las muchas formas de violencia que se manifiestan en conjuntos humanos (violencia social) y entre individuos (violencia interpersonal).
Cuando alguien hace algo que perjudica a otros psicológicamente, mentalmente, moralmente o emocionalmente, ejerce violencia psicológica. O sea, cuando se perjudica a la unidad, coherencia, o equilibrio interno del otro.
A pesar de poder presentarse acompañados por otras formas de violencia, los siguientes ejemplos pueden ser vistos básicamente como casos de violencia psicológica: amenazas varias – promoción del terror, odio, etc. – imposición forzada de ideologías, etc. – propaganda falsa o negativa – promoción de falsos valores de vida – educación prejuiciosa – censura de áreas del conocimiento, la cultura, etc. – desinformación – nihilización – etc.
Hay mucho de violencia psicológica en el imponer formas de vida, de subsistencia, credos, costumbres, etc. O sea, imponer los propios modelos sobre otros por medio de la coacción, la extorsión, o la ignorancia (promovida o aprovechada). Mucho de esto se esconde bajo palabras tales como “educación”, “moral y buenas costumbres”, “tradición”, etc.