Personalidad es la estructura del comportamiento del hombre, formada por su tipo humano (biotipo o temperamento) al irse incorporando al «mundo».
El tipo humano o temperamento determina sobre todo la velocidad y el tono de la respuesta frente a los estímulos, pero la cantidad y la calidad de éstos va produciendo en el biotipo, huellas o grabaciones que conforman los hábitos.
Con el biotipo se nace. Está determinado sobre todo por el funcionamiento glandular. No se descartan cambios en el biotipo a lo largo de la vida.
Al biotipo se van incorporando grabaciones que dependen del tema social, de los actos realizados, de shoks aislados y de repeticiones a nivel sensorial y a nivel sicológico.
A la personalidad no se la desdobla tan simplemente en reflejos incondicionados y condicionados. Más bien puede sintetizársela en esta fórmula: condicionamiento fisiológico (biotipo) + condicionamiento de memoria (grabaciones) = personalidad.
El ensueño aparece ahora como una respuesta al estímulo de grabaciones nuevas. Cada nuevo estímulo para ser grabado impone al circuito y en su punto de localización, la exigencia de movilizar un potencial energético para que (dicho estímulo) sea «fijado». Además la carga aferente se difunde alrededor del punto de localización y suscita en zonas contiguas asociaciones que permiten tener situaciones estructuradas y no aisladas, de cada dato sensorial.
Las cadenas asociativas se despiertan por contigüidad, similitud y contraste. Son básicamente actos, pero tienen por correlato objetos mentales que generalmente son imágenes o ensueños como se los denomina en la Escuela.
Y es posible la existencia de un núcleo de ensueño porque él es la respuesta de estructura general y definida a estímulos particulares que están de todas maneras organizados entre sí.
Si se modifica violentamente el quimismo del biotipo o el género de los estímulos, variar la personalidad y correlativamente el ensueño. Pero como el funcionamiento químico tiene cierta fijeza en cada organismo (de ahí que existen biotipos) y las huellas de grabaciones tienen su «profundidad» por repetición, por hábitos, lo normal es que la personalidad regrese a su punto anterior. Luego de las experiencias distorsionadoras.
Aquí es donde la Escuela introduce un giro característico.