Diario. Relaciones de viajes. C.Colón. Madrid. Sarpe, 1985. En la nota introductoria de este libro se sostiene que “del autor se conservan relativamente pocos documentos y, en cualquier caso, buena parte de ellos han llegado hasta nosotros gracias a copias de fray Bartolomé De las Casas, que mantuvo una estrecha amistad con Diego Colón, lo que le permitió tener acceso directo al archivo y a los libros del descubridor. Así, gracias a una copia autógrafa de Las Casas se conserva el resumen de los Diarios del primer y tercer viajes. Esto hace pensar que se ha podido alterar sustancialmente el texto original de los Diarios. Sin embargo, investigadores posteriores han ido puliendo las copias de imprecisiones y alteraciones, y las versiones actuales resultan altamente fiables. A la falta de originales se une otra dificultad en las obras colombinas: el debatido problema de la lengua usada por el autor… Colón es ante todo un hombre de mar, y, por tanto, este marino estaba acostumbrado a chapurrear mil lenguas sin lograr expresarse bien en ninguna. A diario y durante sus años mozos el Almirante hubo de entenderse con sus compañeros en la jerga que entonces se llamaba ´levantisca´ , esto es, del Levante, del Mediterráneo.”