Dice el notable arquitecto italiano A. Sartoris que “Vaquero Turcios ha hecho una arquitectura esculpida, fraccionada en segmentos con concavidades y articulaciones de volúmenes… Sobre estos volúmenes, sobre los fortísimos y audaces voladizos lanzados en el vacío, han sido excavadas las figuraciones y encajados gráficamente los textos de las inscripciones, a la manera de grandes dibujos y graffiti. Formas volantes de carácter monolítico. Monumento narrativo. Primera obra de arte construido realizada a escala urbana.” A su vez, O. Guayasamin opina sobre la obra que: “Desde el punto de vista estético, alcanza niveles de alta poesía. Las masas arquitectónicas que podrían parecer en un primer momento demasiado estáticas, adquieren una gran ligereza y equilibrio. El monumento es al mismo tiempo la cordillera de Los Andes y las velas de los barcos. Quiero decir con esto que es macizo como una roca y liviano como la vela de una nave. Es, en fin, el monumento de mayor envergadura que se ha realizado en Europa en los últimos tiempos, y el de mayor firmeza.” Vaquero Turcios y el Arte Construido. Monumento al Descubrimiento de América. A. Sartoris. Madrid. Abaco. 1977.