¿Qué experiencia hemos sacado de las coordinadoras barriales?

En ciertas coyunturas han funcionado bien. Luego se apagan. No tienen permanencia.

A nivel cultural tuvieron más permanencia. Se invitó a otras publicaciones barriales, gente de radios, etc. Funcionó muy bien pero los sellos de goma dificultaron las cosas. Se han hecho talleres de artistas, etc. Cuando trabajamos nosotros y el prestigio se reparte con otros, la Coordinadora funciona y en el barrio se avanza en imagen. Es muy fuerte el «como si».

También hemos realizado actividades culturales en el Café Tortoni. Se juntaron 85 personas y el evento fue organizado por 3 de los nuestros. Hay una publicación de este tipo que sale en estos días.

Hay un Club de Artistas, escritores, etc. que se ha formado a partir de una publicación barrial relacionada con una escuela de Arte. La idea es hacer algo al estilo de «La Maga» y a nivel nacional. Distribuido en los kioscos. Reúne la producción de gente suelta, fragmentada, que no tiene dónde expresarse.