Separamos canales, lo político y lo intelectual. Para el primero, Frolov, y para el segundo Pavel. No hay que mezclar los temas. Hemos recibido señales claras. Hemos contestado al fax de Frolov y ahora la iniciativa está en sus manos. No enviamos nada a la URSS, misiones, dispersiones, etc.

Hay que cultivar las relaciones.