Ejercicio: Describir y definir un objeto para alguien que no lo ve.
Tengo que explicar que hago con mi cabeza para que los demás lo sepan. Diez personas pueden ver el mismo objeto desde perspectivas diferentes, y no ponerse de acuerdo. Todos decir cosas verdaderas, pero desde intereses diferentes. Si esto pasa cuando describimos una relación humana o una situación, el asunto empeora. El interés es lo que te hace enfatizar un aspecto u otro. La no fijación del punto de vista y el interés es lo que ocurre cotidianamente.
Lo habitual en los trabajos de equipo es fijar los objetivos pero no el punto de vista. No es necesario que se explicite, pero debe quedar claro ya que si no nadie entiende qué haces con la cabeza.
Ejercicio: Describir un objeto sin explicar el punto de vista.
La descripción se facilita si ubicamos los objetos en una región de objetos. Por ejemplo diez personas que se encuentran reunidas salen del lugar y uno que queda escucha golpear la puerta, y ante la pregunta: «Quién es?» alguien dice: «Yo!». No reconocemos al que llama por el texto sino por el contexto.
Una cosa es la relación de las partes del objeto entre sí y otra es la que establece el objeto como estructura con los otros objetos de la misma región. Es un lío la comprensión sin los contextos; muchas veces es más importante el contexto que el texto.
Nunca hablamos de los objetos en sí mismos. Aun en una descripción científica no estás hablando del objeto en sí. sí. Has fijado un punto de vista y un modo de mirar dado por los instrumentos.
Si alguien hace una descripcion sin fijar el punto de vista, es muy dificil seguir lo que hace con su cabeza. Si diez personas describen un objeto y no se ponen de acuerdo quiere decir que siguen puntos de vista distintos (o, a lo mejor, ninguno).
Las regiones de objetos se refieren a contenidos mentales (recuerdos por ejemplo) asociados entre ellos.
Esto es también un ejemplo de los dicho respecto de que las palabras no sirven, pero ahora a otro nivel. En general ha quedado claro que las palabras de nada sirven si las comparamos con un hecho. Pero ahora agregamos, ademas, que lo que cuenta son los antepredicativos, la intencion de una persona, lo que quiere hacer. Con las mismas palabras 2 personas tienen intenciones diferentes. Con mismas palabras dos personas terminan haciendo cosas diferentes. vista y un modo de mirar dado por los instrumentos.
Para poder mirar la cosa en sí necesitamos todos los puntos de vista e intereses, lo que es lo mismo que decir que no hubiera punto de vista. Siempre se puede hablar desde un punto de vista, pero hay otros y no se agotan.
A veces por contexto hay un acuerdo en el modo de ver y se cree que se ve el objeto en sí. Cuando hay un cambio de momento histórico lo que sucede es un cambio en el modo de mirar, un cambio del punto de vista. Se habla del mismo objeto desde hace siglos, pero va variando el modo de mirarlo.
Hasta hace poco tiempo se confundió la esencia de un objeto con la capacidad abstractiva del observador, y se creyó que esa esencia estaba en el objeto y no en la cabeza. Se veian los trabajos de la cabeza como afuera. Creian que esa descripciones que hacian con la cabeza eran la realidad (externa) misma.
Cuando asistes a un fenómeno en tu conciencia descubres determinadas leyes, por ejemplo: color y extensión son contenidos no independientes, no puedes representar a uno solo de ellos. Otros aspectos no independientes en la conciencia son el acto y el objeto (memoria: objeto recordado, atención: objeto atendido, representación: objeto representado).
La representación es limitada, el objeto existente es siempre mucho más que el objeto representado (y viceversa). No hay representación que escape al espacio (visual, auditiva, cenestésica, etc.) y no hay representación posible sin tiempo.
El espacio de representación no necesariamente es coincidente con el espacio de la cosa en sí. Tal como no podemos hablar de la cosa en sí, Nunca hablamos de los objetos en si. Esto es así porque siempre los veo desde un punto de vista particular, personal. Pero si nos ponemos de acuerdo sobre el punto de vista allí sí nos podemos entender, dentro de ese contexto. Hasta poblaciones enteras se pueden poner de acuerdo en un punto de vista sobre algo.
Hay que considerar que un objeto, para mi, no es solo la percepción visual, sino también tactil o auditiva, etc. (Cada uno describe un objeto que se encuentra en la mesa, y se comprueba de que cada uno tiene un punto de vista diferente).
En el ejemplo practico se ven diferencias, por ejemplo, en el concepto de color del objeto descripto. Esto es así, porque seguramente el concepto de color, (para Franco) fué incorporado cuando se encontraba en una situacion vital particular. A partir de allí es que luego surgen los diferentes puntos de vista. también el tipo de instrumental que se utiliza para percibir el mundo hace variar el punto de vista (por ejemplo: un microcospio para un cientifico).
Por contexto historico-social, también las mismas poblaciones pueden tener un punto de vista similar (p.ej. el punto de vista actual economicista, mercantilista). Cuando cambia el punto de vista de las poblaciones cambia la época historica. (p.ej.: el Renacimiento o lo que ocurrira en este momento histórico).
Mientras, lo que se ve desde un mismo punto de vista se cree que es la realidad misma.
En las artes, por ejemplo, reducian los objetos a su forma mas abstracta. Luego decian que la esencia del objeto eran esas formas y no que esas formas eran una abstraccion hecha por la misma cabeza del observador. Algunos decian que toda la naturaleza estaba compuesta por triangulos y decian que la esencia de la Naturaleza estaba en esas formas.
La descripcion subjetiva que hago de un objeto es mas que el objeto mismo porque agrego cosas que no están. Por lo contario el objeto simpre es mas de la representacion, porque, si bien agrego cosas que no están, dejo de lado cosas, o elementos que están (y no describo), según mi punto de vista. También los mismos sentidos utilizados limitan el punto de vista.
El tiempo fechado va sólo en una dirección, el tiempo de la conciencia puede ir en muchas direcciones. El espacio y tiempo de conciencia no son homogéneos con los del objeto en sí (naturaleza). Este espacio y tiempo, esta estructuración que hace la conciencia, es la diferencia fundamental entre conciencia y naturaleza. Los objetos están puestos ahí sin intención, en cambio la conciencia sí tiene intención. Al ponerse la conciencia en la naturaleza, la naturaleza cobra sentido. La naturaleza «en sí» es absurda.
Tu cuerpo es un objeto natural y tiene una posición entre los objetos. Tu propio cuerpo no tiene sentido, a no ser para la conciencia. Lo característico de lo humano es cuando ese cuerpo es movido por una intención. Es cuando se abre paso por sobre la naturalidad. Sería muy limitante considerar al cuerpo humano como lo esencial.
El acto diferido, el acto voluntario para ir a los tiempos que se me canten es típicamente humano y no está en los animales.
Es gracias a la negación de la objetividad del mundo, que puedes humanizarlo, porque lo modificas con tu intención. Lo natural en el hombre es que no tiene naturaleza. No hay conciencia sin intencionalidad.
Los errores de descripción se deben a una teoría subyacente que cree que hablamos de las cosas mismas. Pero lo único que ocurre es que hablamos en un mismo momento histórico y cultural que pone un punto de vista que permite cierto acuerdo (la época). Nadie decia: «De acuerdo a nuestro modo de ver, la Tierra es plana.», se decia simplemente «La Tierra es plana». Es un modo de ver dado por un momento histórico.
Como se cree que se habla de las cosas en sí, parece innecesario precisar un punto de vista. Aunque tengas razón en tu descripción, si esa descripción no coincide con el modo de ver, no tienes razón para ese momento histórico. Para tener razón hay que tomar en cuenta el punto de vista en que está el otro.
El otro realiza un comportamiento para mí inexplicable, porque lo veo desde mí. Pero no veo como el otro me ve. Cómo con la cabeza que tiene el otro me está viendo a mí.
El espacio de representación no existe en sí. Si no hay objeto representado, no hay espacio de representación. Si quiero representar el espacio de representación, tengo que representarlo dentro de un espacio de representación, y en este caso es este último el espacio de representación.
Lo que une el acto y el objeto es la intencionalidad. Esto se da en un tiempo y en un espacio que es diferente al del objeto natural. Cuando hablamos de conciencia hablamos de este mecanismo. Puedo representar un objeto en cualquier tiempo y en cualquier espacio. Esto no es lo que pasa en la naturaleza.
El cuerpo, (como toda la naturaleza), va en una dirección, (nos estamos poniendo viejos…). Un leño que arde (por ejemplo) no puede volver atrás; arde «como en una dirección que es hacia adelante». Un detalle al margen de estos temas es observar como estamos encolumnados con nuestro cuerpo, con lo natural. No vemos al cuerpo como no esencial. Por ejemplo, ¿no es cierto que nos ofendemos cuando se ironiza sobre nuestro cuerpo? …
Determinados comportamientos que me parecen extraños, pierden extrañeza si me pongo en la mirada del otro. Nos interesa elastizarnos de ese modo. Al hacerlo, ver‚ que no puedo sostener racionalmente la descalificación del otro. Este es un esfuerzo no natural.
La gente ordenar las cosas como les guste, del mismo modo que uno ordena lo que pasa en un enamoramiento. Lo que quiere es no salirse del propio punto de vista. Si cambias de punto de vista dirás que lo importante es que uno no quiere salir de la aversión o no quiere salir de la atracción. Más importante que lo que dices es el antepredicativo de querer o no querer.
No entran balas cuando los antepredicativos son otros. No hay posibilidad de cambios de punto de vista si no se quiere. «No te va a acompañar en un viaje intelectual».
Si estás en lo cierto para ese momento histórico es una gran ayuda que el momento histórico barra con un sistema de creencias. Toda la razón del mundo no vale un carajo si los antepredicativos sociales no se desplazan.
Si interesan las relaciones humanas hay que entrenarse en ubicarse en la mirada del otro. No se trata de tener razón, se trata de que el otro la perciba. Si no quieres hacer esto descubrirás que tus intenciones más profundas no son que el otro te entienda, sino dominarlo, por ejemplo.
Esto es importante porque terminará expresándose en una forma común de trabajo en la base, en un tipo de procedimientos y mensaje que comenzaremos a utilizar, a partir de hoy, en la base (Pasos en el contacto y Encuesta). «Lo que tengo que hacer es verme a mi desde el otro, como desde sus ojos, pero con las formas y pensamientos y valores del otro. No como si fuera una tercera persona que nos mira a los dos».
Si uno reflexiona realmente, ve que siempre tiñe una intención. Estoy buscando algo, estoy tratando de producir algo. Puedo cancelar elementos, agregar otros, etc. Puedo hasta actuar de mala fe. Ver cosas que luego digo no ver, o cancelar cosas del otro (y en ambos casos «saberlo»).
El enamoramiento es un ejemplo en donde esto es claro, porque es irracional. En síntesis la realidad misma no existe para mi. Uno termina siempre por hacer y lograr lo que quiere, y esto es con independencia de lo que se dice con las palabras, (que muchas veces no coinciden).
Las cosas que me pasan las intencióné. Hago todo para producir algo. Está todo en el contexto, y no en el texto.
El sistema prácticamente te anula la reflexión y la autocrítica y todos piensan que le «pasan» cosas (como producto de agentes externos, causas externas). Por ejemplo cuando alguien pierde referencias, tiene una intención. (No es por una nube radioactiva que pasó por el cielo…).
Antepredicativo: Un modo elemental de comenzar a reconocerlos es el hecho de decir que las palabras no tienen valor con respecto a los hechos. Lo importante es ver el antepredicativo porque es lo que realmente uno quiere. (Por ejemplo: los padres que pegan a los hijos, que es lo que quieren realmente, y que es lo que dicen?)
Se refiere a cuando el mismo momento histórico barre los antiguos antepredicativo. Como actualmente la revolución tecnológica que está acelerando los procesos y por lo tanto el cambio «dentro de las cabezas».
Otro ejemplo es el Renacimiento cuando se cambió el punto de vista sobre el mundo y significó un cambio en todos los campos. (La tierra es redonda y gira alrededor del sol, por ejemplo). La verdad es relativa al momento histórico y no hay «realidad» en sí misma que se pueda oponer. Por ejemplo los antiguos decían que nada más pesado que el aire podía volar, y veían continuamente pasar por sus cabezas a los pájaros…
Los voluntaristas tendrán problemas con este enfoque porque no tienen en cuenta los antepredicativos históricos, piensan solo en ellos, no en que también existe un medio que condiciona. Cuando queremos poner en marcha el Movimiento es necesario considerar el medio (momento histórico). No depende del voluntarismo. En la acción del voluntarista el medio no existe. Cuando él lo descubre o entra en tilt, o cambia. Todo esto influye directamente sobre el Movimiento.
Aunque no aciertes, te dará mucha elasticidad y comprensión.
Los antepredicativos hacen a cómo estás posicionado para ver el mundo. Es un sistema de creencias.
Si nada es más importante para uno que uno mismo, ¿por qué habría alguien de interesarse en uno? Si hubiera un dios, él te diría: «¿Por qué tengo que hacer algo por ti, si eres el centro del mundo?»
Uno tiene la intención de hacer cosas por los demás porque no quiere que la gente se joda, y eso a uno le gusta. Cuando la acción de uno termina en otros, eso a uno le gusta.
La elección entre situaciones contradictorias vitales, genera necesariamente angustia (Jehová ordena a Abraham que sacrifique a su hijo).
Disciplina viene de discernir, discípulo, el que aprende, pero derivó en represión.
Hay que tener cuidado, no es difícil equivocarse y creer que se va para «arriba» cuando en realidad se están reprimiendo emociones.
El cambio de enfoque produce cambios conductuales. Si me pongo en el mirar de los demás cambio de enfoque. Un cambio de enfoque de la propia vida produce modificaciones importantes. Este re-enfoque es posible siempre que uno lo quiera. El re-enfoque no funciona como juego intelectual, sin ese querer. Se gana, pero no rinde.
Un punto importante es elastizar la perspectiva, elastizar posiciones mentales, el continuo ponerse en el lugar del otro, ver los trasfondos de lo que finalmente quiere hacer el otro. Si pudiéramos habilitar a los nuestros de una forma sencilla para que llegue abajo este cambio de perspectiva les haríamos un gran favor -porque el proceso histórico mismo está haciendo eso- si se ejercitara en ver las cosas de un modo o de otro, que su verdad es relativa a su posición, etc.
Si yo no me pongo en el lugar del otro cuando explico algo, y el otro no entiende y yo continuo sin ponerme en su lugar, quiere decir que algo quiero hacer con él (que no tiene que ver con explicarle cosas, por ejemplo). Si continuo explicando, a pesar de que ya es notable que no entiende, ¿qué es lo que quiero realmente de él?
En realidad lo que uno hace, incluso cuando hace cosas para que los otros estén mejor, es porque a uno le gusta. Pero aquí lo importante es comprender que siempre parte de uno, de los intereses que uno tiene. Claro que hay diferencias en las consecuencias del hacer, especialmente en las consecuencias hacia los otros, pero en todos los casos la cosa parte siempre desde mi, porque uno quiere, porque a uno le interesa, es desde uno.
El tema de la solidariedad hacia los otros, debe ser comprendido en este contexto. Soy solidario con el otro desde mi, porque a mi me gusta (no, por el otro, como se plantea infantilmente en el Sistema, o desde el otro). Puedo ponerme en el lugar del otro, si esto me gusta, pero siempre soy yo el que se pone (o mi cabeza). Esto no me impide llevar adelante acciones solidarias, pero las comprendo en este «desde mi».
Es un ejemplo de como pueden derivar las cosas en esta cultura externalista. Todo este asunto de la disciplina tiene raíces internas, correspondía a actos referidos a actividades internas y hoy se utiliza (por ejemplo) para las disciplinas deportivas, o disciplina militar, etc. Cuestiones externas en definitiva. La disciplina externa la entendemos como represión, ya que no es lo que «quiero» hacer sino lo que «debo» hacer. Reprimo lo que quiero hacer por lo que debo hacer.
Esto recién empieza, recién empieza la reacción en cadena de la revolución tecnológica, recién empiezan las inseminaciones artificiales, recién empieza el hogar computarizado, ya no puede el ser humano responder al estado de naturaleza. La incertidumbre por el tiempo que viene, el liazo neurótico colectivo, todo esto se produce porque uno permanece en una misma postura mental cuando todo cambia. Con la cabeza hay que lograr una adaptación creciente al cambio producido por la misma acción del hombre en un lapso muy corto, muy comprimido. El cambio social tecnológico va a modificar, va a acelerar las condiciones de vida. Va a ocurrir que la fijeza del punto de vista va a traer problemas serios en la condición de vida. La gente ya dice que no puede seguir los acontecimientos.
El proceso está obligando al ser humano a «mover» la cabeza. Esto va a ayudar a salir de una aburridera que no daba para más.
Si pudiéramos explicar a la gente nueva: «En la etapa en que estamos uno de nuestros objetivos es habilitar su cabeza para el gran cambio que viene, cambio que va a dejar a medio mundo loco e inadaptado». Así es que este cambio de punto de vista es útil.