Ahora dicen que hay un «revival». No es así, la situación es exactamente al revés. En ese momento, era el auge de la producción, en todos los países se pedía a gritos mano de obra, porque no se daba a basto. Así surgió la inmigración y había trabajo de sobra para todos, se necesitaba gente. Cuando surgió el hipismo, que era una capa mínima de la población, y planteaban la no participación, el flowers power, ellos tenían miedo que estas ideas se expandieran y la gente no quisiera trabajar. Y los persiguieron y le endosaron todo tipo de lacras, y los convirtieron al sistema. Ahora es al revés, la gente les sobra. Tienen tecnología, no hay trabajo, no los necesitan. Entonces les conviene que se droguen, que no participen, que se marginen.