Siempre lo hubo, pero hoy los jóvenes están desesperados, no quieren saber nada con nadie. Los han usado, los han engañado, los han cagado a tiros. Ahora dicen a todo que si, pero no se enganchan con nada. Afortunadamente en muchos lugares, los jóvenes se están sumando con su medio inmediato a nuestras cosas.