Es una descripción hacia adentro de lo mismo que se hace hacia afuera. Por ejemplo, tengo miedo y siento que trabajan mis glándulas sudoríparas. En cambio la Fenomenología es la descripción de los fenómenos internos y se observan los mecanismos que sueltan esos fenómenos.

Descartes puso en duda la percepción, el trabajo de los sentidos. Puedo tomar por real lo que no se me presenta intermediadamente por los sentidos, sino por lo que se me presenta de inmediato, clara e indistintamente. Si veo esa puerta no puedo tomarla por cierta, y dudo de ella. Lo que es indudable es que pienso en esa puerta y que estoy dudando de ella.