Hemos hablado de detonantes de fenómenos sicosociales, que pueden ser simplemente una imagen o un rumor_ que se difunda por la ciudad, una región o el planeta. Actualmente los dos puntos en que podrían producirse circunstancias detonantes de fenómenos sicosociales a escala mundial son la ex URSS y China.
En la ex URSS lo único que se mantiene intacto y monolítico es el Ejército Soviético. Todo lo dem s se ha deteriorado, pero ellos conservan su unidad y convicción. El Estado Mayor del Ejército Soviético est convencido de que los antiguos políticos del PC son los actuales gobernantes de la ex URSS y de que han construido sus mafias personales en convivencia y acuerdo con los políticos occidentales. Est n convencidos adem s de que todo ese modelo no favorece a la población y que se ha desarrollado por mezquinos intereses personales, en contra del pueblo.
Día a día estos militares ven producirse desórdenes crecientes y se sienten cada vez menos inclinados a dejar que tales cosas sigan ocurriendo. No se sabe precisamente cu ndo ni cu l podría ser el detonante, pero sí es cierto que ellos est n dispuestos a intervenir para parar el desorden. Esta intervención podría ser, por ejemplo, tomar el poder en algunos países o todos los de la ex URSS. Podrían intentarlo: son un ejército de 3.000.000 de soldados muy disciplinados, con gran maquinaria bélica muy sofisticada y armas nucleares, y monolítico en sus convicciones.
Podrían simplemente ponerse en pie de guerra y, antes de que se disparara una sola bala, por la sola noticia circulando en el planeta o la imagen de unidades avanzando sobre Moscú, por ejemplo, qué pasaría en las poblaciones de Europa del este, del resto de Europa? qué pasaría en el Mercado Común Europeo, en USA, en Japón? Por ejemplo, el proceso de reconversión de la industria bélica se detendría de inmediato y r pidamente volverían a apuntar los misiles. Qué temores se sincronizarían? Podrían producirse todo tipo de cosas, fenómenos sicosociales destructivos y no destructivos, sin que se hubiera disparado una sola bala, sólo por una imagen.
Otro detonante potencial es China. Actualmente la población de China asciende a 1.140.000.000 de habitantes. (Y «actualmente» quiere decir el s bado 4 de julio de 1992 a la noche, porque seguramente el domingo a la mañana ya había aumentado). Adem s de esa cantidad de habitantes cuentan con una tecnología muy desarrollada, hoy muestran señales de estar al borde de una guerra civil. Si tal cosa sucede, por lo menos el 10% de la población (120.000.000 de habitantes) va a desbordar las fronteras y a invadir los países vecinos: Vietnam, Camboya, Rusia, Nepal, India, etc. No hay que pensar en 120.000.000 de personas ordenaditas en filas con un bolsito al hombro y presentando sus pasaportes a las autoridades fronterizas. Nada de eso, van a desbordar con tanques, arrasando, huyendo.
Hay que pensar que China no es Yugoslavia, un país pequeño con poca gente en donde puede haber una guerra contenida dentro de sus fronteras y cuyo desborde puede controlarse desde todos lados. China es otra cosa. Y otra vez, ante la noticia y las im genes, qué ondas, qué temores, qué fenómenos surgirían?
Este es el momento histórico que nos toca vivir y éstos son puntos de vista que permiten tener una visión del mismo.
En este mundo y momento en que nos toca vivir, hacia qué apunta el Movimiento, qué se propone hacer?
El M. apunta a generar un movimiento social mundial constituido por organizaciones flexibles que estimulen una amplia participación popular y trabajen por la abolición de todas las instituciones y valores que no sean útiles para la vida humana. El movimiento social mundial debe adem s generar una mística que dé respuesta a las necesidades individuales de coherencia y sentido. Es decir, el fenómeno no debe quedarse en lo social, sino producir _fenómenos que procesen en los individuos que lo compongan.
Ese fue el caso de Irán, donde el fundamentalismo isl mico no sólo fundó la república Isl mica, sino que generó una mística. Que el hecho se corresponda con un paisaje de hace 1.400 años es otra cosa, pero tiene esas características.
Hay ejemplos de movimientos sociales que luchan por la abolición de condiciones e instituciones contrarias a la vida humana, pero que a los individuos los hacen sentir muy mal. Tal es el caso del marxismo. Entonces, pasan 72 años y la gente est igual que antes, no aprendió ni cambió nada. El opuesto son las corrientes doctrinarias que proponen el trabajo individual y hacen sentir mejor a las personas, pero no se meten con el sistema ni por casualidad. Estos ejemplos no nos interesan.
Cada momento histórico pone en la conciencia humana ciertos antepredicativos que impiden que la gente vea lo que est sucediendo, aunque lo registre._ LA GENTE REGISTRA EN EL NIVEL DE SENTIDOS, PERO NO ESTRUCTURA EN EL NIVEL DE LA CONCIENCIA. (Al respecto, viene bien el conocido ejemplo de los científicos medievales que veían volar pajaritos todos los días, pero no cuestionaban por eso el postulado científico que proclamaba: «Nada más pesado que el aire puede volar»). Aunque a la gente se le explique lo que sucede no lo cree; es m s, ni siquiera guarda las explicaciones en la copresencia para que le sirvan después. Nada, nuestras explicaciones pasan de largo sin dejar rastros.
En el 80 decíamos que la URSS era un cascarón vacio, que la gente no lo creía, que el socialismo real no existía, y no lo escucharon. Si ahora salimos a explicar, tampoco nos van a escuchar. Así que esta es una época de acción: acción que apunte a reconstruir el tejido social, a dar referencia y a direccionar procesos.
Nosotros apuntamos a poner en marcha tales acciones. Alguien podría decir: «El Movimiento es una pequeña hormiga sumergida en un universo social inmenso y frente a colosos poderosísimos. Ante la inmensidad de lo que hay que modificar parece más sensato concluir: No hay nada que hacer».
Tal cinismo, aparte de ser aburrido y de no gustarnos, montaría el imperio del nihilismo y el absurdo existencial, así que al Movimiento no le queda otra que «colocarse en zona» (esto en el lenguaje deportivo significa estar listo para entrar en juego) y generar acciones que reconstruyan el tejido social, den referencia y direccionen procesos.
Porque asistimos a una época en que en todo el mundo las estructuras de base ya no son estructuras de base, sino cascarones vacíos. En todo el mundo hay un sordo clamor de los pueblos solicitando referencia, pidiendo factores aglutinantes.
El Movimiento en su estructura, organización, proceso y dirección, responde a un particular momento histórico. No disparamos un proceso de cierta dirección sólo porque nos gustaba por ahí. Estuvimos y estamos respondiendo a un momento histórico con un planteo, una organización y una dirección acorde a las características del momento histórico. Así que el tema hoy es reconstruir el tejido social, dar referencia y orientar procesos y todo eso en la acción.
Cómo se relaciona lo anterior con la prouesta de M. del documento que se presentó en la reunión semestral?
Veamos qué pasa si pensamos en el desarrollo de una comisión, por ejemplo. Un miembro de la estructura del M. genera en un lugar determinado un mbito y hace una propuesta de acción. Para qué? Para aglutinar gente. No es un pretexto, es un mbito real y una acción que tiene sentido, pero el objetivo mayor y global de todas las acciones que se emprendan es que la gente se aglutine.
El que hizo la propuesta y pone el mbito, de inmediato suelta para que las personas se organicen como quieran. Por ejemplo, se logra que las personas de la oficina, del barrio o de la universidad se vuelvan a relacionar. La comisión podría funcionar bien o no, es decir podría o no lograr los objetivos que se propone, pero de todas maneras estamos reconstruyendo el tejido social.
El que hizo la propuesta y pone el ámbito, orienta, pero no controla (alienta a seguir, destaca lo positivo, pero no dice qué hay que hacer o que hay que alcanzar un hito determinado). El est reconstruyendo el tejido social, dando referencia y direccionando el proceso en la acción.
En un CCD se produce el mismo fenómeno; se establecen relaciones, se reconstruye el tejido social en la acción. Esta es una época en que las personas ya no se referencian en las instituciones. Es una época en que las personas se referencian en otras personas. Ya no se referencian en partidos políticos tradicionales y poderosos, sino en individuos desconocidos (Fujimori, Perot). Es una l stima que todos ellos sean unos tipos cretinos.
Entonces, como las referencias ser n cada vez más personales, el M. deber potenciar la generación de guías sociales.
Las organizaciones de base, hoy convertidas en organizaciones de cúpulas, convocan a sus bases como se hacía antes: redactando un manifiesto en el que se explican y defienden cuestiones de interés para esas bases. Ellos hacen lo mismo que antes y la gente no asiste al evento, aunque se supone que es de interés para el conjunto. Por qué la gente no asiste? Porque la cúpula desconoce los códigos que hoy operan en la cabeza de la gente. En la cúpula se habla de otros códigos que ya no tienen vigencia.
Qué códigos hay hoy vigentes en la cabeza de la gente? El dinero, el sexo, la soledad, expectativas difusas y cambiantes, necesidad de estar con otros. Cuando nosotros convocamos a reunirse «para nada», damos la posibilidad de que cada uno llene ese espacio con sus propios contenidos, tal como en el caso de las experiencias guiadas. Esa convocatoria se abre a una amplia franja de códigos: alguno ir en busca de sexo, otro en busca de amigos, otro en busca de la posibilidad de hacer un buen negocio. No importa. Claro, los nuestros no deberían suponer que es «para nada», al contrario. Se trata sólo de formular una convocatoria abierta a todo tipo de códigos.
En una época de acción, cómo se cualifica la gente? En la acción._ Sin seminarios ni explicaciones, poniendo el cuerpo. Y debería cualificarse en tres aspectos principalmente:
- a) Los diferentes estratos sociales tienen cada uno sus propios códigos de relación y de conducta. Lo que es v lido en uno no lo es necesariamente en los otros. Así que para relacionarse con estratos diferentes hay que ir cambiando los códigos. Esto es algo que nuestra gente no sabe hacer. Por lo general se instalan en un solo estrato y a los otros los temen o los degradan. Así que una cuestión importante sería que los nuestros aprendieran a navegar entre estratos. Por ejemplo, la gente de estratos altos incorporar usos, modismos y lenguaje de los estratos bajos y a la inversa los de estratos bajos incorporar los de los estratos altos. Los intelectuales deben simplificar su lenguaje, otros deber n aprender a expresarse, etc. Y todo esto simplemente haciéndolo.
- b) Otro punto importante es desarrollar la capacidad de manejar relaciones en la calle. Entrar en contacto con la gente, hablar de lo nuestro y concretar el siguiente paso en la calle. Es como aprender a ser buenos vendedores callejeros, presentar el producto, interesar al cliente y rematar la venta, todo en la calle, sin el apoyo institucional de un entorno, un mbito o un aparato. «A pulmón».
- c) Por último, los nuestros tendrían que hacerse expertos en la puesta en marcha de todo tipo de acto que aglutine gente. Uno o dos de los nuestros ser capaces de montar un festival al que asistan 5.000, por ejemplo. Cuando seamos capaces de aglutinar, pasaremos al siguiente paso, los movilizaremos.