Mendoza, 27 de marzo de 1993
Estos apuntes tienen como origen una conversación telefónica que se desarrolló entre las ciudades de Mendoza y Milán.
Hemos tenido un crecimiento global de un 12% en el trimestre. No obstante los problemas en los consejos Gamma, Phi, Epsilon, hemos crecido un poco. En los operativos ha participado entre el 50% al 60% de las personas, es decir, han sido un poco blandos, pero ha sido interesante para percibir en qué está el medio y la gente del medio.
Así que el operativo de abril, será un poquito más enérgico, ya que mostraremos más experiencia y no estaremos en lo del menú de opciones. Los integramos a nuestros grupos y después veremos para qué sirve la gente, para los barrios u otra cosa. Con claridad, con energía, ya que después veremos para qué sirve. Los convocamos con claridad y energía y así referenciaremos. Pero tendrá las mismas característica que los anteriores. No habrá en el operativo de abril elementos nuevos. Después del operativo comienzan las cosas nuevas.
Nosotros hemos generado un Movimiento y hemos explicado que el Movimiento es algo fantasmal, inasible, tan bien lo hemos logrado que a la gente le resulta difícil entender qué es el Movimiento.
Sólo van quedando dos fuerzas dinámicas en el planeta: las Cómpanys y el Fundamentalismo. Hay otras fuerzas emergentes, las cabezas rapadas, los intolerantes y sicópatas de toda especie que están todavía en estado tribal, en estado de bandas, son fuerzas emergentes que no se han desarrollado.
La cómpany ya tiene claro que el neoliberalismo fracasó así que producirán la militarización de un Paraestado. Irán a la militarización de la sociedad.
Las cómpanys al estar en contra del estatismo quieren parecer como libertarias, pero en realidad lo que han hecho ha sido vaciar el estado. El neoliberalismo se ha impuesto muy rápido y fracasó muy rápido. Hoy es una antigüedad luchar contra el neoliberalismo.
Las fuerzas políticas no son fuerzas dinámicas.
Los pueblos están actuando recíprocamente con los políticos. Ahora los pueblos comienzan a darle la espalda a los políticos.
El fundamentalismo es más general que el islam, también es fundamentalismo toda forma de intolerancia, pero claramente el islam está en crecimiento.
Estas fuerzas tratan de moldear la sociedad a su imagen y semejanza. Los pueblos son públicos, los gobiernos administraciones, los ministros consultan a los gerentes de las cómpanys. Los fundamentalismos no se conforman con los países de trasfondo musulmán, quieren la república islámica y la república musulmana mundial.
Es una situación de alta peligrosidad.
Frente a esta situación, de desvalorización, de desorientación, de crisis de valores, de crisis de representatividad es que es interesante plantear el Humanismo como respuesta. El humanismo tiene que dar su opinión frente a toda la situación que nos toca vivir, incluida la religión. No estamos en contra de las religiones, pero fundamentamos a Dios desde el desarrollo del ser humano. Desde el desarrollo humano se puede llegar a Dios, y no al revés. Sino llegaremos a momentos de absolutismo total.
Nos tendremos que meter en todo. Tendremos que replantear la relación entre Capital y Trabajo. Eso de que la ganancia es para el Capital y el sueldo para el Trabajo, ¡eso no!
Hay un problema con la dirección de los acontecimientos. Lo que para ellos es «Progreso» para nosotros es «Catástrofe». Todo ésto habrá que fundamentarlo muy bien en un documento que contenga cuáles son los principios humanistas.
Que se diferencie muy bien al Humanismo del humanismo ingenuo, del humanitarismo. El humanitarismo no es una fuerza transformadora, es paliativo de problemas. El humanismo ingenuo es humanismo sin dirección. Hay que hablar del ecologismo troglodita, en que el ser humano vino al mundo a arrasar con la naturaleza. Hay que desarrollar la ecología humanista.
Nosotros no vamos a sacarle el capital a nadie, sino que vamos a cambiar la relación entre capital y trabajo.
No hay acuerdo posible con un mundo que va al desastre global. Nunca nos van a mirar bien. Frontalizaremos y daremos referencia. Hay una fuerza negativa que está emergiendo que es el odio al ser humano. Que es un odio contra ellos mismos. Porque ellos no se soportan a sí mismos. Sobra el ser humano, por ejemplo en los despidos, en la supremacía de la naturaleza.
Tu eres del «movimiento» o eres de «Movimiento Humanista», ¿Se observa la diferencia en el registro que produce? Está el Movimiento Humanista y los humanistas. Los del Movimiento Humanista son los que ya están actuando, y los humanistas que son los que se sienten humanistas pero que aún no actúan. O sea, que con ésto perderemos lo fantasmal, nos haremos perceptibles. No enfatizaría en el humanismo histórico, porque hay culturas que no tienen antecedentes renacentistas. No podemos decir que el humanismo es hijo del renacimiento porque por ejemplo en Asia no tiene ese trasfondo. Hay corrientes en Asia que tienen esa dirección aunque no se llamaron humanistas.
Terminado el operativo de abril, largamos con todo el Movimiento Humanista. Locales centrales del Movimiento Humanista, Centros Humanistas de Comunicación Directa. Todos humanistas. Ese documento será contundente pero general. En cada lugar habrá que traducir a cosas más prácticas. Se trata de algo más integrista, no se trata de una postura política.
Esto va al choque. Pero es consecuente con nuestro planteo de referencia. Ser humanista es una postura global e integral.
Si soy humanista me interesará que toda expresión humanista avance aunque yo me aplique sólo en una.
Somos anticentralistas. Respetamos a las minorías. Las mayorías deciden pero ahí no se acaba el discurso, porque las minorías importan. Nos interesa toda la riqueza del ser humano, las modalidades, lingüísticas, folklore, la Nación Humana es toda la riqueza de la diversidad humana actuando y no una sociedad humana robótica y uniforme.
Nadie va a hacer desaparecer al otro. ¿Por qué alguien va a renunciar a su pueblito, cuando en su pueblito hace un aporte?
Así es que vamos a la confrontación, lo que para ellos es progreso, para nosotros es catástrofe. Lo que ellos llaman democracia para nosotros es absolutismo y control de los medios subjetivos de la población, control de los medios de información. Lo que ellos llaman democratización para nosotros es militarización, con ejércitos privados al servicio de la cómpany.
En esta emergencia necesitamos que los ejércitos se humanicen.
La democratización de las FFAA es una concepción de la revolución francesa. Nosotros no tenemos por qué tener que ver con eso. Nosotros vemos la necesidad de que las FFAA asuman posiciones humanistas en el mundo contemporáneo. Las FFAA se suponían al servicio del pueblo, y han terminado al servicio de los estados, y como algún partido político controla ese estado, por lo tanto han terminado al servicio de ese partido político y no del pueblo. Y ahora comienzan a convertirse en policía privada de las cómpanys.
Es cierto que si hoy se toma el poder político no se saca nada, porque es subsidiado por la cómpany, pero nosotros necesitamos manejarlo, porque es la única forma de desyugularlas, porque las cómpanys igual operan a través del estado.
Estamos hablando de una transformación humanista, ya que no podemos hablar de revolución, porque la palabra revolución está mal gravada (se asoció la palabra revolución a sangre). Pero el significado es el cambio de las estructuras sociales en dirección humanista y eso es lo que llamaremos Transformación Humanista.
Se es humanista o se es antihumanista
Denunciaremos la persecución de los principios que proponemos como Antihumanismo. Antihumanismo es igual a traición al ser humano. Hay mucha gente metiéndose en cualquier locura. Hay que dar referencia. No es verdad que las clases medias no participan. Están participando de cualquier gurú o cualquier ocultista que les salga al paso.
Tendremos que tener una mística enorme pero sin poner por encima a los dioses.
El humanismo cristiano tiene que convertirse al humanismo y en su desarrollo puede encontrar a Cristo, pero ese ya no será un inquisidor.
Nosotros somos fuertes y polentosos, no hay que tener problemas con ser polentosos, el problema es la dirección.
No las hemos pasado hablando de dar dirección y referencia. ¡Hagámoslo! ¡El futuro llegó!
Una vez hecho el documento tendremos el problema de implementarlo. Cómo implementarlo, cómo le daremos vigor.
Este problema dos (de la implementación) no se resuelve en siete días. Será lento y crítico.
Marx dijo: «Los proletarios no tienen nada que perder salvo sus cadenas. Proletarios del mundo uníos». Es hermoso. Ponlo en contexto histórico con el capitalismo salvaje avanzando. Nosotros decimos lo mismo: la gente no tiene nada que perder salvo evitar la catástrofe. Estando condicionados por todo como estamos no se puede optar ni ser libres.
¿Cómo será nuestro trato con la gente? Con cariño genuino, aún en la lucha contra ellos, porque la lucha no es para hacerlos desaparecer sino para romper barreras. No es lucha contra personas, es lucha contra creencias. No es contra personas. No podemos naturalizar al enemigo como si no tuviera posibilidad de cambio.
La gente está encadenada, empieza a odiarse a sí misma, no queremos matarlos, al enemigo más acérrimo hay que verlo como encadenado por su situación. Te brotará el hígado, pero nuestra postura es la otra. El hígado no debe gobernar la dirección.
Hay que dar referencia, la gente está preguntando: qué debo hacer, y eso es bueno por una parte pero muy malo por la otra, es un síntoma de que pueden hacer cualquier cosa. Es un síntoma muy peligroso.
Los nuestros que están en el asunto que se preparen para la guerra. Si los nuestros quieren municiones: ¡las tendrán!
No es momento para dubitativos. ¡Ya pasó ese tiempo! No podemos flexibilizarnos para los dubitativos.
El documento saldrá después de los operativos de abril. Los de mayo y junio tendrán otra tónica. Los planteos serán fuertes. Somos humanistas integrales. Todo humanista quiere el avance de cualquier frente humanista. No es una postura política, es una postura de vida.
Otros temas
Vamos a ver qué va a suceder con Clinton. En doce meses va a llegar a una situación de impopularidad enorme. Es una época en que se requieren referencias y no relativismos.
Ahora se ve lo que les pasó a los socialista por transformarse en neoliberales, dejaron que la derecha ocupara el poder. Que no nos vengan a dar lecciones de cómo se dirige un proceso si ellos le han dejado el planeta a la derecha. Los neoliberales se fueron al carajo y ya no le son útiles a las cómpanys, son una antigüedad.
Usarán los argumentos del terrorismo, de la desocupación, para militarizarlo todo.
Argentina está utilizando el término «capitalismo humanizado». En Bolivia el movimiento sindical está moviéndose fuerte. En Venezuela a Carlos A. Pérez lo afirmaron los yanquis, porque los militares y los guerrilleros se asociaron para botarlo. Y los yanquis no quieren líos en las Américas. Cómo evitarán el colapso de Brasil, en donde hay declarados cincuenta millones de indigentes.
En Colombia vota el treinta por ciento de la votación, eso significa que Gaviria gobierna con el quince por ciento del electorado.
El momento es muy inestable. No estamos en condiciones de torcer los acontecimientos, pero hay que moverse rápido. No creamos que Latinoamérica se salva de la militarización.
Las clases populares no se expresan porque están desintegradas y los gobiernos padecen la ilusión de que no hay problemas porque los pueblos no se expresan. No protestan porque no hay ligazón pero ésto va a un lío social de proporciones. Ellos exhiben que los pueblos no protestas como si estuvieran bien, y entonces arde Los Angeles. Pero no es la interpretación, lo que ellos han hecho es que desconfían los unos de los otros.
«Las nuevas generaciones están desesperadas» dijo Willy Brandt a dos meses de su muerte.
Es verdad que el momento viene a favor nuestro. Pero necesitamos potencia y resolución para darle resonancia.
No podemos desdibujarnos para los dubitativos. Ahora necesitamos potencia.