Nuestra prioridad uno en este momento es el crecimiento en el Movimiento y ello tiene sus plazos muy bien definidos y muy breves (6 meses). Pero hay también otros intereses que tiene el movimiento que tomarán un mayor tiempo de procesamiento para ponerse en marcha, como es la construcción de los organismos. Esto es de interés para el movimiento, aunque no sea la primera prioridad en este momento.

Acá se están produciendo cambios muy rápidos, necesitamos estructuras sólidas que compensen las estructuras del sistemas que quedarán convertidas en cáscaras vacías sin factor humano.

Necesitamos construir los organismos con gente del medio. No es un proceso rápido. Necesitamos gente decidida en eso. Gente puesta y dispuesta y que lo haga con gusto.

El proceso de construcción de los organismos se va a acelerar con gente que tenga experiencia, gusto y esté puesta en el asunto. Será el factor humano el que dispare el proceso. Esto requerirá de un trabajo de mucha continuidad. Debemos procurar que la gente que se aboque a construir los organismos no se sienta fuera de la orgánica del Movimiento, que pueda trabajar los retiros, encuentros, centros de trabajos, reuniones de información de interés común.

A esta actividad de construcción de los organismos hay que darle duro, no se puede hacer bien a medias. La recomendación es que en lo posible se haga una sola cosa y bien, con todo. Esto es lo que podemos recomendar… después cada cual verá. Pero nosotros no podemos hacer otra cosa que recomendar.

Pero las cosas no son en blanco y negro, tienen matices y habrá que ver que hacer en cada caso. Si alguien por ejemplo está a cargo de una embajada, en primer lugar será muy interesante, por ejemplo, que pudiera conseguir una embajada en donde tiene línea estructural del movimiento y si no se logra, pareciera lo más interesante que en ese otro país se abocara a formar una linea del movimiento, al desarrollo estructural. Allá no podrá montar el organismo (capaz que lo echaran por injerencia en los asuntos internos).

Pero será importante que se centre en una sola cosa, armar líneas.

En el caso de una alcaldía, es razonable y es obvio y así se espera, que uno se aboque a desarrollar el organismo, es coherente con el cargo. Es lo que se espera que haga cualquier partido político.

Hay matices en cuanto a si el cargo es fuera o dentro del país a que se aboca uno.

Todo lo que sea entrar para nosotros es interesante. Está muy bien que, «algunos justos estén rodeando a los injustos». Pero no hay que hacerlo en forma mediocre, hay que hacerlo bien y con todo.

Si uno no tiene estructura y se ha dedicado a desarrollar el organismo será entonces delegado de grupo. Reconoceremos el servicio prestado en la formación de organismos si obtenemos éxito en esa labor. Aún no sabemos la fórmula, tampoco sabemos como lo mediremos pero estará. Si sale mal sale mal y si sale bien serán reconocidas estructuralmente.

La recomendación es darle con todo en una sola cosa y si alguien tiene dudas de que sería lo mejor, entonces consulte a su orientador. Obviamente como el orientador tiene como primera prioridad el desarrollo estructural orientará a esa persona en ese proyecto. Alguien podría entonces alegar que no es lo que quiere… Y entonces ¿para qué pregunta?, haga lo que quiera.

Pero la sugerencia es que si alguien tiene dudas que consulte a su orientador.

El Movimiento se compromete a que aquellos que participan en la construcción del organismo puedan participar en las actividades del sector apoyo y en reuniones de interés general de acuerdo al nivel más acorde que le parezca a la línea. Será interesante que participe con sus pares.

En el caso de la diputación el planteo es diferente, ese es otro tema. Allí habrá un reconocimiento estructural para la diputada independientemente del resultado, porque ese fue el compromiso asumido y fue planteado como una misión.

En síntesis hemos dicho:

No perder el contacto con el movimiento quienes trabajen en la construcción del organismo.

Reconoceremos el trabajo aportado en la construcción de los organismos, de acuerdo a los resultados… aunque no sepamos todavía la fórmula.

Y no desconoceremos los compromisos asumidos con la diputación.

Nosotros en el movimiento podemos pedir a nuestra gente disciplina estructural, pero ésto siempre y cuando no vaya en desmedro de su propio proyecto estructural. Tenemos el caso de alguien que tiene como primario, secundario y terciario su proyecto estructural, que no estaba interesado en asumir cargos públicos, pero que desde el gobierno la solicitan explícitamente. Es un ofrecimiento a la persona y no tanto al partido. Aprovecharemos esta situación y exploraremos algo distinto. Intentaremos desde esa función desarrollar la estructura, aunque el cargo venga por vía política, intentaremos desarrollar estructuras del movimiento. En la función política se intentará poner asesores que vayan solucionando los problemas del cargo.

Si se detecta que con asesores en el cargo no podrá desarrollar su estructura, está fácil, no asume. Si asume y luego se da cuenta que no podrá desarrollar su estructura, se enferma de los riñones y renuncia. La función deberá ser asumida con total libertad. Pero si resulta…. Hasta ahora se supone que con los políticos no podemos formar estructura, pero veamos puede ser que desde dentro cambie la cosa… Necesitamos total libertad.

Buscamos disciplina estructural siempre y cuando no vaya en desmedro del proyecto estructural del individuo. Así que acá tenemos una situación distinta.
Hay algo que podría ser de particular interés para el movimiento: una ubicación pública para uno de los nuestros, con mucha libertad de movimiento, ya que necesitamos que cumpla una función importante en uno de nuestros consejos de primera instancia, que le va a requerir muchos desplazamientos. Un punto de mucha importancia para nosotros será tener un espíritu de cuerpo entre los nuestros que ocupen cargos, entramos a las funciones pero «si tocan a uno de los nuestros se rompe el orden institucional». No es cosa que «manoseen» a ninguno de los nuestros. Lo ponen por un tiempito y después fuera con él. Nuestra respuesta tiene que ser de cuerpo, que se vea algo sólido. Esto va a requerir un espíritu solidario, acá no sirve el que «se corta sólo» y se «aperna» al cargo. ¿Qué nos puede importar un cargo público, si lo primario para ese no es la obra común?
La voz parlante del mensaje es la diputación. Necesitamos coherencia y no contradicciones en cuanto a lo que hagan los nuestros y los planteos de la diputación. Necesitamos coherencia entre nosotros y en los planteos. Así que tendrá que haber mucho trabajo en equipo.

Todas estas son experiencias nuevas pero lo que hagamos aquí puede inspirar a otros puntos.

Hemos dado un enmarque general, hemos hablado de compromisos asumidos, de compromisos que no podemos asumir, de una función como experimento, de la necesidad de contar con un cargo que dé mucha movilidad, de la coherencia y que si le damos por una línea le damos con todo.

 Santiago, 15 de Enero de 1990