Mendoza
10 de junio de 1999
Evaluación.
La evaluación que queremos realizar en la reunión de Coordinadores en Madrid, en julio de este año, es procesal. Tendrá la forma de un relato, que no se atendrá a reglas prefijadas, donde cada Consejo expondrá su historial. Nos interesa entender qué ha ido pasando en términos de actividades y en términos numéricos, sin enfatizar demasiado en cifras. Un relato donde nos quede claro qué hicimos y no hicimos, qué actividades resultaron aptas para el crecimiento y cuáles no, qué cosas fueron experimentos y cómo salieron, actividades, resultados y consecuencias. No hay una grilla común a llenar.
El relato será más interesante si podemos vincularlo con lo que pasaba en el medio social a medida que llevábamos adelante nuestro proceso, haciendo comparaciones que nos permitan tener parámetros. Se pude decir, por ejemplo: «desde hace cinco años la estructura se mantiene estacionaria» y ese dato aislado es inteligible, pero no basta para comprender. Será necesario comparar con algo equivalente en el medio. Así, si vemos que «ya no existen las organizaciones de voluntarios en el Sistema» o que «las instituciones del Sistema se han vaciado» es más fácil ponderar y comprender lo que significa haber mantenido estacionaria la estructura.
Nos interesa entender nuestro proceso general a partir de entender cada proceso en particular. Saber con certeza cuál es el espíritu de los nuestros, si tienen ganas de seguir accionando y en qué condiciones, será más útiles que exhibir números. Estos vienen bien para ilustrar el relato, pero no son su médula. La propuesta, la sugerencia, el aporte, puede ser otro capítulo.
La extensión del informe de cada Coordinador será de 30 minutos como máximo.
Otros temas
Hay tres temas que resaltan en este período en la Argentina:
1. El armado de los departamentos,
que es lo mismo que decir: el armado de estructuras en los departamentos. Nos interesa ir a las ciudades de los departamentos más próximos hasta cubrir los que reúnen el 60 por ciento -como mínimo- de la población de la provincia y obtener candidatos que conformen el gabinete y procedan a la confección del Libro Naranja del lugar.
A los candidatos hay que explicarles que deben ingresar a la estructura del Movimiento. Es necesario que comprenda una idea simple: él debe contar con un equipo de por lo menos diez personas que también ingresen al Movimiento y sean capacitadas para que cada una de ellas conecte, a su vez a diez personas que apoyaran en la campaña y que fiscalizarán en las próximas elecciones.
Estamos diciendo que el candidato, antes de las elecciones debe ser delegado de equipo y estar encaminado a delegado general. Pero no nos atosiguemos con la imagen y vamos paso a paso. Leamos de nuevo la idea simple.
Eso es lo importante. El candidato es un delegado de equipo que orienta a sus familiares, amigos y vecinos para que lo ayuden en la consecución de votos y tareas de difusión. Ellos tienen la misión de traer 10 afiliados que serán fiscales. Está claro que los votos se consiguen afiliando y comprometiendo a esos afiliados a fiscalizar.
Por cierto, el candidato debe explicar claramente que ese equipo será, en caso de ser electo, instalado en cargos públicos para ayudarlo a cumplir bien su función. Pensémoslo de este modo: ¿a quién debería nombrar en esos cargos si no es a la gente que lo ayudó? Todos deben estar en la estructura del Movimiento desde antes de las elecciones.
Si se arma bien la base van a salir concejales. Si no es en esta elección será en otra próxima. Si salen electos concejales, saldrán también diputados. Nos interesa prioritariamente hacer este armado estructural con consecuencias políticas.
2. El mensaje.
Necesitamos perfiles claros, propuestas duras, tono amable y con burbuja. Los planteos ideológicos y políticos deben ser duros, claros, contundentes y expresados con suavidad, no es necesario gritar. Conviene actuar con firmeza, no con histeria. Por ejemplo: no será lo mismo decir: la ley de Responsabilidad Política penará el incumplimiento de las promesas electorales, que decir: los que incumplan las promesas electorales irán presos. Vamos a poner los puntos sobre las íes y a explicar claramente que no tendremos piedad con el capital financiero, que llenaremos las cárceles con los corruptos y cosas así Pero esta firmeza no tiene que hacernos perder la burbuja ni convertirnos en basiliscos, seguiremos con buena onda.
3.Recursos.
Necesitamos «combustible» para echarle a la maquinaria de difusión y con dinerillos que podemos poner nosotros no llegamos a hacer algo significativo. Por lo tanto, es imprescindible obtener ayuda del medio social al cual nuestra acción va a beneficiar. No hay que pensar que la Función Recursos se va a encargar exclusivamente, sino que todos podemos expertizarnos en este tema.
Necesitamos solventar nuestros locales, materiales y campañas de difusión, etc. El aporte podría ser directo, o su equivalente: que contraten directamente ellos -como empresas- los espacios de televisión o de radio, las pantallas de subte o de calle; que arreglen con la imprenta para que tengamos 50 mil ejemplares de El Humanista todos los meses; que financien con anuncios nuestros programas de radio; que influyan en los programas donde anuncian para que seamos reporteados, etc. Ya haremos una lista de actividades que empresas chicas y medianas pueden favorecer sin darnos dinero a nosotros. En otras palabras, necesitamos recursos para difusión o una acción equivalente, en una escala superior a la conocida hasta ahora.
4. Consejo de Coordinadores.
El Consejo Sigma muy probablemente configure un Consejo de Coordinadores el 21 de Junio venidero. Si esto sucediera ése Consejo se separará del actual, y a partir del próximo semestre, tendrá sus propias reuniones semestrales. Lo mismo ocurrirá con los próximos Consejos que vayan surgiendo hasta que lleguemos al Consejo de Coordinadores Generales donde tendremos una Coordinación electiva.
Un detalle menor es que Mario recomendó enfáticamente que el Consejo Sigma no acepte pases de líneas de otros Consejos, porque hay quienes se acercan a la estructura «exitosa» del momento buscando satisfacer protagonismos personales y demostrando una falta de visión de conjunto. Esas personas, lejos de ser una ayuda para la estructura a la que intentan sumarse, causan dificultades. Es preferible perderlos a que se sumen a perturbar -a la corta o la larga lo hacen- en otras líneas. Por cierto, no estamos hablando aquí de personas aisladas sino de delegados generales o de equipo y por supuesto, la engañifa de autoexcluirse o bajar de nivel, es un truco inaceptable.
Ocurre que con los pases de un Consejo a otro nunca dieron resultado positivo, por diversos motivos. Nunca trajeron aparejados desarrollos estructurales y sí ocasionaron conflictos, roces y otras dificultades.
La salida para quienes tienen dificultades reales en un momento determinado está en el mismo Consejo que integran, es en ese ámbito donde deben solucionarse los problemas. Siempre hay solución si el interés está puesto en el desarrollo del Movimiento.
El criterio de no aceptar pases, quedó expresamente ratificado entre los Coordinadores.
5. Síntesis.
Lo anterior es un resumen de las conversaciones principales, pero la síntesis es, para todos los temas, incluida la evaluación: tenemos que encarar decididamente el crecimiento estructural.
Necesitamos estructuras númerosas. Esto es posible ahora porque el medio está muy permeable, pero sobre todo porque los nuestros han comprendido la importancia de contar con una fuerza propia que pueda dar referencia a una sociedad desvencijada y sin rumbo.