Buenos Aires, 27 de julio de 1993
Apuntes de una conversación con el Coordinador

 

Frente político en Chile:

En Chile en su momento la coyuntura era sumamente clara: la cosa pasaba por alinearse a favor o en contra de Pinochet. Se trataba entonces de tumbar a Pinochet. Fue en ese contexto que participamos de la Concertación, es decir en el contexto de armar un frente contra Pinochet. La DC hablaba en aquel momento de gobierno de transición hasta tanto se recuperara la democracia.

Vienen entonces ahora las nuevas elecciones y la DC propone el continuismo, o sea el continuismo de la hegemonía de la DC. Por otra parte en estos cuatro años no se ha restablecido la democracia como se dijo al comienzo. El Pinochet sigue con cargos, y sigue con gente suya metida en la administración, y sigue decidiendo e interfiriendo. A nivel económico han implantado el neoliberalismo y de ningún modo han implantado la democracia como eran las premisas iniciales. Por nuestra parte en estos cuatro años hemos logrado contar con un diputado, algunos agregados culturales, un embajador, algunos concejales y algunos puestos públicos menores. Pero, en síntesis, no están hoy las premisas iniciales de la Concertación.

No vamos a participar de un frente que no haya sido armado por nosotros. El tema central no es si ganamos votos o no, sino que lo que nos interesa es posicionarnos de frente a lo que se viene. Dar referencias claras mientras ellos se están yendo al carajo. Nuestro interés es posicionarnos correctamente.

Somos partidarios del frente amplio pero no armado por otros. Si sacamos votos o no, no nos importa. Posicionarnos es el tema, porque lo que hoy esta, mañana no va a estar, entonces empecemos a fijar referencias ya.

En Chile lanzamos el frente la Nueva Izquierda y la DC y el PC (que armo su propio frente con los «sellos de goma» tradicionales) obviamente putean, porque no es el frente que ellos querrían. Pero no somos nosotros los que rompemos la unidad, son ellos los que la rompen por querer hegemonizar.

Frente político en Argentina:

No nos conviene romper el frente donde estamos trabajando. El PH seguirá en el frente pero no hablara de los candidatos que no son nuestros, ni de las fuerzas que lo componen. Los temas que nos interesan son el Frente Amplio, el PH y nuestros candidatos, y haremos mucho lío a favor de nuestros candidatos.

Si apoyáramos a los otros candidatos a futuro nos quedaríamos con los «dedos agarrados en la puerta», porque en el caso en que salgan elegidos, ya conocemos como termina esta historia. Ellos después terminan traicionando, arreglan todo con una embajada o con un carguito menor. No son confiables, no podemos quedar mezclados con ellos.

Entonces en el futuro habrá dos frentes: los frentes tradicionales con sus códigos ya viciados y nuestros frentes. Y no puede haber frentes ni siquiera con puntos mínimos de acuerdo, porque no estamos de acuerdo ni siquiera con sus puntos mínimos. Tampoco estamos de acuerdo con sus procedimientos.

Posicionarnos es el punto central.

Para nosotros una elección es un conflicto en el cual nos apoyamos para hacer lo mismo que hacemos durante el resto del año: definirnos, definir a otros y organizar. Una elección no tiene como punto central el hecho de sacar candidatos (de todos modos si los sacamos de «taquito», bienvenidos) sino que es un motivo de conflicto.

Lo único que va a valer en poco tiempo mas es la fuerza real. Y nosotros tenemos que lograr esa fuerza posicionándonos y haciendo crecer la organización social de base. Nadie en este momento se interesa por este tema, todo lo contrario, todos trabajan para desarticularla.

Queremos la revolución mundial y queremos repúblicas humanistas, las repúblicas actuales no sirven porque tienen como base la democracia formal. Y entre otras cosas también nos interesa la toma del poder político. Ya se ha agotado nuestra paciencia.

Entonces quiénes no se definen en nuestra dirección no son humanistas, son cualquier cosa. Los frentes los definimos nosotros o sea, en dirección humanista, o sea con nuestros valores.

La historia se ocupara de hacer desaparecer a todos ellos. Ellos están muertos porque siguen apostando a la cosa cupular. Ellos no pueden ni siquiera imaginar la posibilidad de ir a armar algo a la base social. Queda claro, entonces, que el futuro somos nosotros.

Reticularemos todos los lugares para desarrollarnos en la base, luego tener un partido es una cosa muy fácil. Pondremos en marcha muchas actividades en base a los conflictos pero la consecuencia siempre debe ser el crecimiento de esa organización. Crecimiento con continuidad. Donde «mordemos no soltamos». Lo que se hace y no deja rédito estructural y organizativo es trabajo sin sentido.

Como organizamos la base social:

Podríamos apoyarnos en algo que ya esta organizado, que existe como cuadro y que conecta con la base social. No son los obreros, ya que si hoy observamos la pirámide poblacional la base obrera se ha reducido notablemente y va rumbo a la extinción. Hoy la base esta conformada básicamente por los empleados. Se acabo el mundo que tenia como base a los obreros, el mundo de la minería, el agro y la pesca. Hoy el proletariado no existe, la prole ya no existe.

A que apuntamos, entonces? Apuntamos a un cuadro que ya existe en el sistema. Y son dos temas los que nos llevan a conectar con ese cuadro: el tema de la salud y el tema de la educación.

La columna vertebral del cuadro del Movimiento Humanista serán los que curan al pueblo y los que educan al pueblo, es decir los trabajadores del campo de la salud y del campo de la educación. Los médicos, enfermeros y enfermeras, asistentes sociales, maestros, profesores, etc., etc. Así que paralelamente los temas centrales de nuestro mensaje (los temas prioritarios desde donde haremos girar todo nuestro mensaje) serán : la salud del pueblo y la educación de pueblo.

Queremos un pueblo sano, es decir un pueblo con buena alimentación, con medicamentos, con vivienda, con vestimenta, etc. Pero no queremos «animales rozagantes», queremos sumar a la salud del pueblo la educación.

Todas estas premisas cumplen innumerables requisitos. Un cuadro conformado por trabajadores de este tipo es un cuadro que ya esta en contacto con la base social, en contacto con el pueblo sin intermediaciones. Puede aglutinar fácilmente a padres y vecinos porque esta en continuo contacto con ellos. Desde el punto de vista espacial en cualquier lugar del mundo, por pequeño que sea, siempre hay una escuela y un dispensario (ademas de una comisaría y de una iglesia…). Observando la composición de nuestro cuadro actual vemos que hay mucha afinidad (contamos ya en la estructura con una cantidad importante de trabajadores de estos campos). Es un cuadro que ya existe, que ya esta armado y al cual solamente hay que variarle el signo. Esta compuesto por muchas mujeres y eso es de mucho interés. Es un cuadro con experiencia pedagógica, organizativa y ademas con una gran vocación de servicio (ejemplos de maestros y médicos rurales).

Por supuesto que no estamos hablando de apuntar a la organización sindical amarilla sino que estamos hablando del trabajo de base que podemos desarrollar a partir de este cuadro. Estamos hablando, por ejemplo, de maestros que arman grupos de maestros, o de aprovechar el contacto con la base social que se produce a través de una escuela o un dispensario en un barrio.

Así que para nosotros a partir de ahora los trabajadores mas importantes son los que curan al pueblo y los que educan al pueblo. Un pueblo que maltrata a estos trabajadores es un pueblo que se va al carajo.

En cuanto a nuestros planteos haremos girar todo en torno a la educación y la salud. Le daremos prioridad a estos temas y encuadraremos todos los problemas desde el punto de vista de la salud o desde la educación. Un plan económico no tiene sentido si los recursos no se destinan a mejorar la salud y la educación del pueblo. Así que por estos lugares volveremos otra vez con la idea de no pagarle al FMI, para que esos recursos vayan a salud y educación. Y si hablamos del crecimiento de la producción es para que esos recursos vayan a salud y educación. La salud y la educación son la riqueza de un pueblo. Con salud y educación se le saca agua a las piedras. Otro planteo que no contemple estos temas es antihumanista. Así que para empezar hablaremos de educación y medicina gratuita y publica. Vamos a cambiar los valores.

Hablaremos de salud y educación no solo en el sentido tradicional. Por ejemplo: para aumentar la producción necesitamos mayor conocimiento de la tecnología y eso es mejora de la educación. Un pueblo educado no es xenófobo; un pueblo educado no es materialista, es solidario; un pueblo educado no es instrumentado. Hablaremos también de salud no solo en el sentido físico sino ademas en el sentido mental.

Y cual es el peor enemigo de todo esto: los monopolios, sean estos estatales o privados. Es necesario borrar con todo monopolio directo o indirecto.

No tenemos problemas con los capitales privados o con los capitales mixtos, pero deberán encuadrarse en el tema de la educación y la salud gratuita. Nada de andar especulando con la educación y la salud del pueblo.

Deberán ser revisados todos los presupuestos estatales dirigidos a la salud y la educación.

Planteando las cosas de este modo estamos haciendo coincidir lo ideológico con lo organizativo. Una organización cuya columna vertebral habla de lo que hace.

En las sociedades opulentas también hay errores graves en el campo de la educación y la salud. En la educación lo primero que les enseñan es que cosa es un dólar o como «cortarse solos». Y no hablemos de los problemas de la corrupción y otros. También hay serias deficiencias en la sanidad.

El proceso social en general esta tomando un rumbo mecánico, y de continuar sufrirá las consecuencias de la física mecánica: en un sistema cerrado aumenta la entropía, que en el caso social se expresa como caos, destrucción y violencia. Así que acá quedan dos opciones o la gente deja que en este sistema cerrado aumente la entropía y que siga la linea mecánica, o la gente empieza a decidir en que condiciones quiere vivir. Es una lucha entre el determinismo mecanicista y la intención. Si dejamos que los acontecimientos sigan es una actitud suicida. La revolución es una necesidad vital, y no vamos a dejar que los acontecimientos sigan esa mecánica y terminen en entropía.

Nosotros ahora necesitamos endurecer posiciones, dar referencias precisas, no como ellos que creen que flexibilizando posiciones pueden plegar. Ahora es de sumo interés radicalizar. Las ideas no son eternas, ahora es oportuno radicalizar. Una verdad inoportuna es media verdad. La verdad es relativa a la oportunidad. La verdad no es como la geometría, es histórica.